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Hay una razón por la que las bolsas de patatas vienen con aire y tiene sentido

Hay una razón por la que las bolsas de patatas vienen con aire y tiene sentido. Seguramente te ha pasado más de una vez: compras una bolsa de patatas fritas y cuando la abres te encuentras con que está medio vacía. Te sientes engañado, piensas que te han timado y que has pagado por aire. Sin embargo, lo que quizás no sabes es que ese espacio aparentemente vacío tiene una razón de ser y que no es un truco de las marcas para ahorrar dinero. Te lo explicamos a continuación.

La razón por la que las bolsas de patatas vienen con aire

En primer lugar, hay que aclarar que las bolsas de patatas fritas no están llenas de aire, sino de gas nitrógeno. Este gas es más estable que el oxígeno y no reacciona a los cambios de temperatura ni a la luz. De esta forma, se consigue que las patatas se mantengan crujientes y frescas durante más tiempo, evitando que se pongan rancias o blandas.

En segundo lugar, el gas nitrógeno también cumple una función protectora. Las patatas fritas son alimentos frágiles y delicados, que pueden romperse o aplastarse fácilmente durante el transporte y el almacenamiento. El gas nitrógeno actúa como un cojín que amortigua los golpes y las presiones que puedan sufrir las bolsas, evitando que las patatas se conviertan en migas.

En tercer lugar, hay que tener en cuenta que las bolsas de patatas fritas no se venden por volumen, sino por peso. Es decir, lo que importa no es el espacio que ocupa la bolsa, sino la cantidad de producto que contiene. Las marcas indican claramente en el envase el peso neto de las patatas fritas, que suele oscilar entre 100 y 200 gramos.

Además, el peso de las patatas fritas puede variar según el tipo y el corte de las mismas. Por ejemplo, las patatas onduladas o gruesas ocupan menos espacio que las finas o lisas, pero pesan lo mismo. Por eso, algunas bolsas pueden parecer más vacías que otras, pero en realidad contienen la misma cantidad de producto.

Por último, cabe señalar que algunas marcas optan por usar bolsas opacas para evitar que se vea el interior de las mismas. Esto puede generar desconfianza en algunos consumidores, pero tiene una ventaja: protege a las patatas fritas de la luz, que puede alterar su sabor y su calidad.

En conclusión, las bolsas de patatas fritas vienen medio vacías por una serie de motivos relacionados con la conservación, la protección y la información del producto. No se trata de un engaño ni de un ahorro por parte de las marcas, sino de una forma de garantizar la satisfacción del cliente. Así que la próxima vez que compres una bolsa de patatas fritas, no te sientas estafado, sino afortunado de poder disfrutar de un alimento crujiente y delicioso.