El chef Paco Pérez representa la alta gastronomía del Alt Empordà, de la mar d’amunt, como le gusta definir a la comarca gerundense donde ha crecido y donde hay que acercarse para deleitarse con las dos estrellas Michelin de su ‘Miramar‘.
Frente al mar, en una elegante caja de cristal, la magia espera en Llançà, donde junto a su mujer, Montse Serra, regenta lo que en su día fue un hostal que los padres de Montse levantaron en esta pequeña población pesquera de la Costa Brava, a caballo entre Barcelona y Francia. Humilde, dicharachero y con una creatividad que desborda, Paco Pérez refleja su carácter en una cocina de vanguardia en la que realza un producto sublime a través de una técnica depurada. Como no podía ser de otra forma, el mar es el gran protagonista.
Es Paco Pérez el chef catalán con más estrellas Michelin: cinco. Además de la biestrellada Miramar, su centro neurálgico y puerto base, dos más esperan en Enoteca, en el hotel Arts de Barcelona y una en Berlín, donde dirige el restaurante Cinco del hotel Das Stue.
Buscando la felicidad
Poniendo el foco en el producto y en la sostenibilidad, generando una experiencia que busca, ante todo, la felicidad del comensal, la cocina de Paco Pérez se puede degustar de distintas formas. Mediante la carta (una visión renovada de la cocina más tradicional) o a través de dos menús: el menú degustación (un viaje por el universo creativo más reciente de Paco Pérez) y el menú tradición (una versión más reducida y con propuestas de la carta).
Pero es MAR21 su último lanzamiento. Con la reapertura y la llegada del otoño, 25 «ideas» componen su último menú degustación. El viaje comienza con Flor de Navaja y Shiso para viajar a Jerez con una almeja y seguir navegando a golpe de buey de mar, cangrejo, un salmonete que quita el hipo y un revisado Arroz en Barca. Anguila, zamburiña u anchoa tampoco se le resisten, así como las trompetas de la muerte o el pichón. Vibrante, equilibrado, su última creación es, sin duda, la excusa que necesitabas para descubrir Llançà. Pero no la única.
Un hotel de lujo
Y es que en la planta superior esperan cinco fantásticas suites en primera línea de mar. Contiguas a la casa del propio chef, el coqueto hotel combina el lujo con el trato cercano de Paco, Montse y el equipo.
Por la mañana, zumos naturales, productos ecológicos del Empordà, huevos Benedictine y creaciones dulces hechas en casa se sirven antes de salir a sentir la tramuntana, el sol de la Costa Brava y hasta la sal del mar.
