Mentiras sobre la baby shower

En los últimos años, por influencia de tendencias en Estados Unidos sobre todo, ha comenzado a tener protagonismo la conocida baby shower. Sí, la fiesta en la que la embarazada es la protagonista y que posee como objetivo el celebrar la próxima llegada del bebé.

Muchos se ha hablado de esa reunión, sin embargo, existen numerosas mentiras o mitos que ahora vamos a intentar tumbar en pro de que puedas conocerla tal y como es. ¿Te animas a descubrir esas falsedades?

Sigue leyendo y podrás salir de dudas:

Es una fiesta solo para mamás

Una de las ideas más asentadas acerca de la fiesta que nos ocupa es que únicamente pueden acudir a la misma mujeres que se encuentren embarazadas o que ya hayan sido mamás. Y eso no es así. No es imprescindible ni necesario conocer de primera mano lo que es la maternidad para poder acudir a esa celebración.

En este caso, podemos determinar que esta fiesta no es excluyente.

Únicamente pueden acudir mujeres a la baby shower

Muy en relación con el mito anterior está el hecho de que hay quienes creen que esta celebración es únicamente para mujeres. Esta creencia también es falsa. A la misma pueden acudir todos los amigos y familiares de la embarazada, independientemente de si son hombres o si son féminas. Y es que todos tienen el mismo derecho e incluso las mismas ganas por festejar la próxima llegada del bebé.

Es más, ¿cómo podía faltar el papá del pequeño a una fiesta en la que este es el gran protagonista y el motivo de alegría de todos? Por eso, en la lista de invitados pueden estar abuelos, tíos, primos…

La fiesta tiene que llevarse a cabo en casa

Dentro del conjunto de creencias o mitos que existen sobre la baby shower también está el hecho de que la misma solo se puede celebrar en casa de los futuros papás. Y eso es mentira, ya que la embarazada y su pareja podrán llevarla a cabo donde deseen o donde más les apetezca. Así, hay quienes no dudan en realizarla en su propio hogar, si no tienen muchos invitados o si tienen espacio suficiente para albergar a todos los asistentes, mientras que otros deciden alquilar un local para la celebración.

En concreto, cuando se opta por reservar un local es porque este ofrece también el servicio de catering, porque los futuros padres se lo pueden permitir, porque es más cómodo o porque les evita el engorro de tener que preparar la vivienda para la celebración en sí.

La baby shower tiene que ser sorpresa para la gestante

De la misma manera, hay que subrayar que otro mito falso sobre la fiesta que conmemora la próxima llegada del bebé es que la embarazada no debe conocerla, que tiene que ser organizada por sus seres queridos en plan sorpresa. No obstante, eso no es así.

Es cierto que a la gestante le puede hacer muchísima ilusión encontrarse con una inesperada baby shower organizada por su pareja o sus amigas, por ejemplo. Sin embargo, hay futuras mamás que deciden ser ellas mismas las que la planifican en pro de compartir con sus familiares o amigos la felicidad que sienten porque se van a convertir en madres.

Otros mitos sobre la baby shower

Aunque los que hemos expuesto son los principales mitos que existen sobre la citada baby shower, no podemos pasar por alto que hay otros que también hay que desmontar en pro de conocer a fondo la citada fiesta:

• Los juegos que se organizan para la citada fiesta son un verdadero aburrimiento. Esto es falso y es que sean un rollo o no depende de la creatividad e imaginación de las personas que los preparan. Las competiciones de cambio de pañales o el adivinar a quienes de los invitados pertenecen las fotografías de niños que hay colgadas, por ejemplo, pueden resultar realmente propuestas divertidas.
• La decoración tiene que ser azul o rosa, según el sexo del bebé que viene en camino. Aunque hemos visto en más de una fiesta de este tipo que se opta por cumplir esa máxima, lo que es cierto es que la misma no es una regla impuesta. Es más, en un momento como el que vivimos donde se está luchando por acabar con el sexismo, no tiene sentido que esa sea imposición. Cada embarazada tiene que elegir el color que más le guste, independientemente de si va a tener un niño o una niña.