Andalucía
Atentado yihadista de Algeciras

Los médicos de la Audiencia Nacional aconsejan internar al yihadista de Algeciras en un psiquiátrico

El cuadro médico de la Audiencia Nacional que realizó a finales de febrero el examen psiquiátrico a Yassine Kanjaa, el marroquí en prisión como presunto autor del ataque yihadista de Algeciras (Cádiz), ha entregado ya al juez instructor su dictamen, en el que recomiendan el internamiento del terrorista en un centro psiquiátrico penitenciario.

En la actualidad existen dos centros de este tipo en España, uno en Alicante y otro en Sevilla. Según han subrayado a Europa Press fuentes conocedoras del caso, este tipo de internamientos se suelen dar en casos severos. La Policía Nacional ya indicó que el yihadista presentaba un «perfil inestable» y que se autorradicalizó de forma exprés en el último mes.

El examen forense de Yassine K. fue acordado por el juez instructor de la causa Joaquín Gadea a efectos de informar sobre si el sujeto era imputable o no. En su resolución, el magistrado indicaba que ese reconocimiento forense se debía hacer con pleno respeto al derecho de defensa del detenido y con su previo consentimiento.

Así, ofició a la clínica forense de la Audiencia Nacional para que dos médicos fueran quienes realizaran el examen al investigado. El día en que se le practicó, trascendió por fuentes jurídicas que el yihadista, en la hora escasa de examen, habría insistido ante los psiquiatras que «veía diablos».

El juez defiende que fue «consciente»

Cabe recordar que Gadea, tras escuchar la declaración del acusado en sede judicial, decretó prisión provisional sin fianza y le atribuyó los delitos de asesinato y lesiones con fines terroristas que, advirtió, podrían conllevar la prisión permanente revisable.

En esa resolución indicaba que la actividad desarrollada por Yassine K. se podía calificar como un ataque yihadista dirigido tanto contra sacerdotes que profesan la fe de la Iglesia Católica como contra musulmanes que para el investigado no siguen los preceptos del Corán.

Si bien interesó ese informe forense psiquiátrico, previamente había sostenido que las acciones violentas las realizó para producir de manera consciente e intencionadamente el mayor daño posible, manteniendo en todo momento el control de la situación.

Objetivos definidos

El instructor hacía constar en su auto por el que acordaba la prisión incondicional que en las dos declaraciones que ha prestado Yassine K., ante la policía y en el juzgado, salvo algunas contradicciones sobre elementos periféricos del relato, era capaz de reproducir en esencia los aspectos más importantes de su acción.

Relataba que la conducta del investigado fue consciente y que tenía definidos sus objetivos, teniendo la opción de causar unos daños mayores, focalizó su acción concretamente sobre los sujetos a quienes atacó, a los que eligió de forma deliberada. Y explicaba que la primera de las acciones fue contra los párrocos, reconociendo que su intención era matar a todos los sacerdotes que se encontraban en la iglesia. En segundo lugar, indicaba el magistrado, centró su ataque contra un marroquí al que consideraba infiel, al creer que estaba ante un musulmán converso por no practicar la auténtica religión, y al que agredió con intención de matarle.

Por todo ello, el magistrado consideró que el detenido se identificaba con un perfil de terrorista autoadoctrinado, que actuó de modo individual y no vinculado directamente con una organización terrorista en concreto, pero que, en definitiva, lleva a cabo su acción en nombre del fenómeno yihadista al que tantos se adhieren de forma remota, generando un ataque violento que causa terror en la sociedad y desestabiliza la paz social.

La Policía ve un «perfil inestable»

Por su parte, la Policía Nacional señaló que el yihadista presentaba un «perfil inestable» y que se autorradicalizó de forma exprés en el último mes.

Además, también confirmaban que al marroquí de 25 años en el registro practicado en su vivienda tras su arresto se le intervinieron «diferentes dispositivos electrónicos que actualmente están siendo analizados, diversa documentación y la funda del arma blanca utilizada en el atentado».

Según los investigadores, se trataría de un «perfil inestable cuya autorradicalización se habría producido de forma acelerada en un corto periodo de tiempo», indicaba la Policía Nacional en un comunicado tras conocerse que el juez de la Audiencia Nacional había ordenado el ingreso en prisión del yihadista.