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Ni Trujillo ni Plasencia: este es el pueblo más infravalorado de Cáceres, y siempre pasa desapercibido

En España hay 8.132 municipios, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Algunos hasta cuentan con un reconocimiento internacional, mientras que otros apenas reciben visitantes. A lo largo de la geografía española, hay localidades que destacan por su patrimonio histórico y tal es el caso del pueblo más infravalorado de Cáceres, un verdadero olvidado por el turismo.

Y que no sea popular, no necesariamente significa que no hallan desarrollado una infraestructura turística suficiente para atraer visitantes. En el caso de Cáceres, este municipio que conocerás a continuación, permanece en el anonimato a pesar de su historia, arquitectura y entorno natural. 

¿Cuál es el pueblo más infravalorado de Cáceres?

Villanueva de la Vera es un municipio situado en la vertiente sur de la Sierra de Gredos, dentro de la comarca de La Vera. A pesar de su proximidad a destinos más conocidos, como Plasencia o Jarandilla de la Vera, no ha logrado la misma notoriedad. Su economía no ha girado en torno al turismo, lo que ha influido en su escasa proyección fuera del ámbito regional.

El origen de este pueblo se remonta al período de repoblación que tuvo lugar entre finales del siglo XII y principios del siglo XIII. En ese tiempo, se formaron cuatro aldeas: Mesa, Curuela, Salobral y San Antón. Durante un tiempo, estas aldeas dependieron política y administrativamente de Plasencia.

Sin embargo, a finales del siglo XIII, el monarca Sancho IV cedió su control al canciller de la Reina, Nuño Pérez de Monroy. Posteriormente, su hermano Fernando asumió el control y, con el tiempo, la propiedad pasó a manos de sus herederos.

En el siglo XV, las aldeas quedaron bajo el dominio de los Condes de Nieva, Diego López de Zúñiga y Leonor Niño de Portugal. Bajo este señorío, las poblaciones se unificaron bajo el nombre de Villanueva. En 1643, la localidad adquirió su independencia del señorío de Valverde tras pagar al Conde de Nieva un total de 3.600 ducados.

Con la caída del Antiguo Régimen, Villanueva de la Vera se constituyó como municipio constitucional dentro de la región de Extremadura. A partir de 1834, pasó a formar parte del partido judicial de Jarandilla. Ya para el censo de 1842, la localidad contaba con 440 hogares y 2.410 habitantes.

¿Qué se puede ver y visitar en Villanueva de la Vera?

Este pueblo, con una extensión de 132 km², destaca por su arquitectura tradicional. Las viviendas se caracterizan por su entramado de madera, muros de ladrillo o piedra y balcones en las plantas superiores.

Además, conserva un casco histórico que fue declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1982. Por otra parte, algunos de los lugares más destacables y que se pueden visitar de Villanueva de la Vera son:

Naturaleza y paisajes poco explorados de Villanueva de la Vera

El entorno natural de Villanueva de la Vera es otro de sus atractivos. Situado a escasa distancia del Parque Regional de la Sierra de Gredos, su paisaje está marcado por desniveles de hasta 2.000 metros. En su territorio destacan varias gargantas y arroyos que desembocan en el río Tiétar.

Estos son sus principales puntos de interés naturales:

Así es la cultura del pueblo más infravalorado de Cáceres

Villanueva de la Vera también conserva tradiciones que han perdurado a lo largo de los siglos. Entre ellas, destaca «El Peropalo», un carnaval con raíces históricas que ha sido declarado Fiesta de Interés Turístico Regional. Esta celebración, que se realiza en febrero, incluye representaciones populares en las que se escenifica el ajusticiamiento de un personaje simbólico.

Otra festividad importante es «Guitarvera», un evento anual que promueve la cultura popular de la comarca y que reúne a músicos y artistas de distintas regiones de España.