Recetas de cocina

Bacalao encebollado

El bacalao encebollado pertenece a la tradición culinaria de varias regiones de España. La cebolla y las especias le otorgan un delicioso aroma a este sustancioso pescado de agua salada. La receta es fácil de preparar en casa, aunque hoy en día el bacalao forma parte de los menús más prestigiosos.

El bacalao es un pescado bajo en grasa, por eso está recomendado en las dietas de quienes quieren estar en forma. Almacena la grasa específicamente en el hígado y de este órgano se extrae el aceite de bacalao que se comercializa como suplemento dietético. Esta sustancia se utiliza con fines terapéuticos, como prevenir el raquitismo en los niños y servir como fuente de omega 3.

El bacalao contiene proteínas de alta calidad, se digiere fácilmente y es rico en nutrientes; es una fuente de minerales como potasio, calcio, fósforo y magnesio. Los minerales son indispensables para metabolizar de manera correcta otros nutrientes como los carbohidratos, las proteínas y las grasas.

Ingredientes:

Cómo preparar bacalao encebollado:

  1. Comprar un lomo fresco de bacalao. De la frescura del pescado dependerá buen sabor del plato.
  2. Cortar los ajos en láminas delgadas y las cebollas en tiras finas. Pelar el tomate. Cortar los pimientos y los tomates en julianas. Reservar.
  3. Calentar una sartén con un chorro de aceite de oliva. Freír los ajos y la cebolla. Cuando la cebolla se transparente, añadir los pimientos y el tomate. Pochar todos esos ingredientes a fuego medio.
  4. Limpiar y lavar el bacalao. Escurrir hasta eliminar por completo los restos de agua. Cubrir con harina.
  5. Calentar aceite en una sartén y freír. Cuando el bacalao esté sellado, sacar con cuidado y poner en la sartén donde se encuentran las verduras. Incluir el aceite en el que se frió.
  6. Agregar un poco de pimentón, un chorrito de vino blanco, sal, pimienta, una hoja de laurel y una ramita de tomillo. Cocinar a fuego lento durante 15 minutos.
  7. Las patatas fritas con una excelente guarnición para el bacalao encebollado. Se ponen a freír aceite caliente hasta que se doren bien. Si se quiere evitar la grasa de la fritura, también se pueden servir hervidas o al horno.