Opinión

Cataluña pierde su ADN bancario

Algunos achacan la huida de empresas de Cataluña al «discurso del miedo». Nada más lejos de la realidad, las empresas que dejan la región, ya sean grandes o pequeñas, lo hacen buscando lo mejor para sus inversores y ahorradores. CaixaBank o Banco Sabadell han mirado por sus clientes. Ante la inseguridad jurídica que domina el contexto han preferido marcharse. Estas compañías, y tantas otras, son parte del ADN catalán.

Una pena, por tanto, que tengan que abandonar su ubicación tradicional. Este empecinamiento que vivimos no nos lleva a ningún sitio salvo al empobrecimiento paulatino y al perjuicio de todos los catalanes. No podemos estar en otro sitio que no sea la Unión Europea y bajo su seguridad jurídica. Cualquier otra cosa es inviable. Así lo demuestran nuestras empresas más importantes.