El 34 % de las familias españolas no puede enfriar sus casas en los meses de verano

Informe de Save the Children, ante la llegada de las altas temperaturas en España, destaca que afecta a 1 de cada 3 menores

Aragón, La Rioja, Andalucía, Murcia, Islas Canarias y Navarra son comunidades que más problemas pasan para climatizar su casa

  • Antonio Quilis Sanz
  • Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora responsable de OKGREEN en OKDIARIO. Antiguo director de El Mundo Ecológico y colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.

Ante la ola de calor que estamos viviendo en España este verano, Save the Children muestra su preocupación ante la situación de que 1 de cada 3 menores en España vive en casas que no pueden enfriar para hacer frente al calor.

Con esta primera llegada de altas temperaturas este verano, las situaciones de algunas familias se ven afectadas ante la falta de recursos para afrontar unos valores térmicos cada vez más altos en sus casas, sobre todo en las ciudades.

Momentos de calor y de desprotección que plantean una alteración de la vida normal, como el estar en casa, pero que van más allá por tener derivadas con la aparición de otras consecuencias, como un mayor riesgo en la salud, el descanso, el necesario ocio o la educación.

Sin recursos contra el calor

Desde Save the Children aportan el testimonio de Sarah, una madre de tres hijos que vive en un barrio de Leganés (Madrid) y que declara que le gustaría tener aire acondicionado, «pero no puedo permitírmelo. Encendemos el ventilador para sobrellevar el calor».

Como Sarah, el 34% de las familias españolas no disponen de recursos suficientes en sus casas para hacer frente al calor del verano, según la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Europa se calienta más rápido

Si el verano de 2023 fue uno de los más calurosos desde que hay datos registrados en España, la temporada de 2024 puede volver a llegar a ser incluso más, de acuerdo al pronóstico de Copernicus, el servicio meteorológico de la Unión Europea.

Naciones Unidas habla de que Europa es el continente que más rápidamente se está calentando y España es uno de los países europeos que más está sufriendo las consecuencias del cambio climático.

Save the Children, en su informe Nacer en un mundo en crisis climática, mostraba que el 86% de los menores de nuestro país sufren al menos un fenómeno climático extremo al año, como sequías, olas de calor y lluvias torrenciales.

Cómo afecta el calor

«La infancia que vive en familias con dificultades económicas es la más afectada por las consecuencias de la crisis climática. Sus condiciones materiales, como la adecuación de sus viviendas, les hacen especialmente vulnerables a eventos como las olas de calor», explica el experto en pobreza de la organización, Diego Santamaría.

Además, Santamaría, habla que «el calor afecta a su descanso y calidad de su ocio, agravando riesgos que ya padecen en términos de salud o rendimiento escolar».

Más de un tercio de los hogares españoles no pueden realizar el gesto de refrescar sus casas en plena canícula

Según la organización, en nuestro país viven 2.664.000 menores en casas con esta situación de desprotección contra el calor que aparece cada verano. Es decir, 1 de cada 3 niños y niñas vive en viviendas no adaptadas al calor.

Es el caso de Ossama, el hijo pequeño de Sarah,  que tiene diabetes y con el calor su enfermedad se agrava. «Tengo que evitar que sude mucho y que pase mucho calor porque puede deshidratarse», explica la madre.

Bonos sociales energéticos

Ante estos escenarios que se viven en muchas casas de nuestro país, Save the Children hace un llamamiento para activar políticas públicas de mitigamiento y adaptación de los espacios en los que viven y se desarrollan los niños y niñas.

«Los bonos sociales energéticos presentan aún elevadas tasas de acceso entre colectivos especialmente vulnerables», declara Santamaría. Continúa explicando que «nuestra propuesta es seguir avanzando en la concesión automática de este tipo de ayudas e implementar los fondos Next Generation de la Unión Europea con planes de adecuación climática de viviendas y edificios».

Comunidades más afectadas

El análisis de esta Encuesta de Condiciones de Vida señala territorialmente que las viviendas de Aragón, La Rioja, Andalucía, Murcia, Islas Canarias y Navarra son comunidades que más problemas pasan para climatizar su casa.

El cambio climático está provocando que en lugares donde, de forma excepcional, se alcanzaban temperaturas extremas, ahora sea algo casi habitual y no anecdótico.

Estos pueden ser los casos de Aragón, La Rioja o Navarra, comunidades del noreste del país y que históricamente no han sido tan expuestas al calor extremo.

Alrededor de un 40% de las familias de estas regiones reconoce tener dificultades para acondicionar sus casas. El año pasado, Pamplona registró la temperatura más alta de su historia, llegando a los 40,6 °C en agosto y Teruel, en 2021, superó los 41 °C.

Las casas españolas, están peor preparadas para luchar contra el calor en comparación con el frío

Peor adaptación al calor

Otro dato que se desprende de la encuesta del INE es que a los hogares les cuesta más adaptar su casa al calor que al frío. Esto se debe, declara Santamaría, porque «es raro en España que una casa no tenga instalado algún sistema de calefacción, aunque sea eléctrica, en los territorios donde hay algunos meses de frío».

Santamaría añade que «la climatización de las viviendas no está tan extendida en territorios menos acostumbrados al calor y en barrios desfavorecidos, lo que conllevaría un gasto de instalación que mucha gente no puede asumir».

«Además de este coste, los precios de los suministros energéticos suponen una carga excesiva en muchos hogares. A esto se suma que el parque de viviendas está especialmente envejecido en barrios de rentas bajas, con edificios energéticamente poco eficientes», señala desde Save the Children su responsable de pobreza.

Escuelas resilientes al calor

Save the Children manifiesta que «no existen suficientes datos de la climatización de los centros educativos, ni a nivel estatal, ni autonómico o local». Como ejemplo, ponen el de la Comunidad de Madrid, por ejemplo, que reconocía que desconoce cuántos colegios tenían aire acondicionado.

Lo que sí existe a nivel nacional son programas públicos para climatizar las aulas, por ejemplo, en Andalucía o Barcelona ciudad. También, en la Comunidad de Madrid, se ha admitido a trámite la iniciativa de ley popular que pide a la Asamblea de Madrid una ley de climatización en centros educativos.

El experto en educación de Save the Children, Alfonso Echazarra, detalla que «es urgente una adaptación de las infraestructuras educativas para evitar la vulneración de los derechos de niños y niñas a la salud, la educación o el ocio».

La organización señala que estos planes deben ser integrales e ir más allá de los espacios de viviendas y escuelas. «La mayor intensidad y frecuencia de temperaturas extremas hacen necesario convertir las ciudades en espacios adaptados, con refugios climáticos, en espacios públicos que permitan a los niños y niñas desarrollar su ocio de manera segura, saludable y accesible», concluye Echazarra.