Inglaterra fue la primera selección en avisar de que va muy en serio en este Mundial de Qatar 2022. Los ingleses pasaron por encima de Irán, como si de una apisonadora se tratase. Casi cualquier acción clara y de peligro fue suficiente para ver puerta. Liderados por un gran Jude Bellingham, uno de los grandes deseados del mercado, y un efectivo Bukayo Saka. El siguiente objetivo es Estados Unidos, que tras su empate inicial ante Gales, necesita sumar puntos para llegar con opciones al último partido.

Los de Gareth Southgate comenzaron con fuerza en este Mundial de Qatar. En los primeros 45 minutos ya dominaban con claridad a Irán con un 3-0 que barrió cualquier esperanza de los asiáticos. Bellingham fue el que abrió la lata y tras él llegaron los goles de Saka y Sterling antes del paso a vestuarios. Saka firmaba su doblete pasada la hora de partido y acto y seguido Taremi hacía su primer tanto. Rashford y Grealish cerraban el grifo de goles inglés y Taremi de penalti en el descuento maquillaba el resultado.

Evidentemente el nivel de Irán dista mucho del que puede ofrecer Estados Unidos en este Mundial. El combinado americano no es aún una selección que pueda coquetear con las grandes aunque poco a poco va elevando su nivel y prestaciones con el paso de los años y la evolución constante que viene ofreciendo la Major League Soccer. La MLS crece y con ella el fútbol americano y las potencias del país que  exporta.

Bellingham y Saka

Los 19 y 21 años de Jude Bellingham y de Bukayo Saka son un buen indicativo de la buena salud que luce también Inglaterra con su nueva generación. Ambos se estrenaron en el Mundial sin ningún tipo de complejo, sin nervios y con una clara predisposición a terminar de romperla en esta primera cita mundialista. El jugador del Borussia Dortmund fue el timón de Inglaterra, el que llevó la batuta y dirigió durante todo el partido. Saka fue de lo mejor, no sólo por sus dos goles, sino también por su constante capacidad para romper a los iraníes. El gunner está también siendo clave para el resurgir en la Premier League del Arsenal.

Inglaterra tiene muchos nuevos motivos para pensar en ella pero tiene todavía por delante los dos partidos que se presuponen más complejos. Éste ante Estados Unidos y el que le enfrentará a Gales en un partido con mucha historia entre ambas selecciones. Demostrar que lo de Irán no fue casualidad y que esa locomotora arrolladora puede ir por cualquier carril.

Pulisic, el líder americano

El gran nombre de Estados Unidos es sin duda Christian Pulisic, por algo lleva el 10 a la espalda. El jugador del Chelsea es el faro de su equipo aunque no es el único jugador de primerísimo nivel en las filas americanas. Dest en el Milan, McKennie en la Juventus, Musah en el Valencia, Weah, el goleador ante Gales, en el Lille… Son muchos nombres propios que buscan el mismo fin.

Pero es Pulisic el que marca diferencias y el que se echará al equipo a su espalda. De hecho conoce a muchos de los jugadores que tendrá enfrente en este partido, muchos a los que ve ya sea en su club o cada fin de semana en la Premier League. Gran parte de las opciones de dar la sorpresa la selección americana pasan por sus botas y su visión.