EN IMÁGENES: Así fue la boda cuento del príncipe Andrés de York y Sarah Ferguson
No pudo eclipsar a la de Diana de Gales y la del príncipe Carlos, pero la de los duques de York fue, sin duda, la ‘otra gran boda’ de la Casa Real Británica en los años ochenta. Pocos podrán olvidar aquel caluroso 23 de julio de 1986 en la City de Londres y mucho menos a aquella novia, cuyo vestido, si bien era ‘más discreto’ que el de la inolvidable princesa de Gales, quedó eclipsado por la flamante corona de flores que ocultaba la impresionante tiara que la reina Isabel regaló a su nuera con motivo de su enlace. Una tiara que probablemente luzca de nuevo sobre una melena igual de ‘ginger’ el próximo viernes, la de su hija menor, Eugenia de York.
Ha llovido mucho desde entonces y, pese a los escándalos que han salpicado no solo al matrimonio -que en realidad nunca estuvo del todo mal avenido-, parece que ahora las aguas han vuelto a su cauce -más o menos-. El viernes, Windsor sustituirá a la siempre regia Abadía de Westminster en una histórica celebración que supondrá el retorno por la puerta grande de Sarah Ferguson al clan Windsor.
Dicen que de una boda sale otra boda y no son pocos los rumores que apuntan ya a una inminente entre los padres de la novia, quienes en realidad, nunca estuvieron del todo separados, solo distanciados. Sería un disgusto para el duque de Edimburgo y quizás también para el propio Carlos de Inglaterra, que no ha terminado de disculpar a su cuñada su indecorosa conducta. Mientras se especula con esta y otras cuestiones, echemos la vista atrás y disfrutemos de las mejores imágenes del que, sin duda, fue uno de los días más gloriosos que nos ha regalado la crónica royal. Pasen, vean y deleiténse…
La pareja escogió la emblemática Abadía de Westminster / Gtres