Pablo Motos da a conocer las dos ocasiones en las que ha estado arruinado
Pablo Motos da a conocer su peor momento en ‘El Hormiguero’
Pablo Motos, obligado a pasar por quirófano: Esto es lo que ha ocurrido
‘El Hormiguero’: Sebastián Yatra desvela qué hace después de un concierto
En esta ocasión, Pablo Motos ha ocupado el lugar del entrevistado y ha desvelado algunos puntos de su vida que eran desconocidos hasta ahora para la audiencia. El presentador de ‘El Hormiguero’ ha concedido una entrevista para el canal de YouTube ‘El sentido de la birra’, de Ricardo Moya, en la que ha destapado algunos de sus secretos más guardados.
“Al principio, pensabas que si abrías la ventana te morías. Entonces, llegó un momento en el que pensé contar el programa, irnos todos a casa”, comenzaba exponiendo Pablo Motos al hablar de los comienzos de la pandemia. Esos duros momentos fueron de los más extremos que ha vivido el periodista durante su carrera profesional.
«Tuve un momento muy vital y alguien me dijo: ‘La vida es igual que un niño en un tiovivo, siempre se va a ir llorando a casa porque quiere una vuelta más, nunca es un buen momento para morirse’», recordaba el presentador. Justo después aprovechaba para asegurar que «la televisión es muy cruel» y que «por eso la pagan bien».
“La televisión es un lugar bastante frío que te desnuda. ¿Por qué pagan de puta madre en la tele? Pues porque te roban el alma…», aseguraba Motos durante la entrevista. «Me arruiné dos veces», admitía Pablo Motos después, al recordar como una marca de chicles adelgazantes con la que trabajó le llevó a la ruina al tratarse de una estafa.
«Estuve a punto de ir a buscarlo y cometer una barbaridad», alegaba el presentador, que acababa asegurando que Laura, su mujer, le frenó de cometer una auténtica locura. Pero esa no fue la única vez en la que Pablo Motos se vio en la ruina. Más adelante, fue la bolsa la que acabó asestando un durísimo golpe a la economía del comunicador tras la explosión de la burbuja inmobiliaria.
Ricardo Moya hacía una pausa para volver a los inicios de Pablo Motos y recordar su época “quinqui”. “Una etapa bastante gamberra de mi vida que me permitió ver el barro. El barro es muy importante. Saber estar en lo peor, saber estar en la mierda. Eso te da un cuajo que no te lo da la universidad. Todas aquellas situaciones me permitieron ver un trozo de la vida que me ha servido de mucho”, exponía el valenciano.
Por último, el presentador admitía ser «bastante huérfano políticamente» y recordaba que sólo hace entrevistas a políticos cuando hay campaña electoral: «Lo único que quiero es que la gente sepa quién es la persona que tengo enfrente y qué quiere». Quizás por eso mismo, el valenciano revelaba que «me gustaría tener pasión por alguien y que me gustara de verdad para ir ilusionado a votar».