España
Navarra

Podemos jalea el tercer grado concedido a tres de los agresores de la Guardia Civil en Alsasua

El portavoz del partido de Iglesias en el Parlamento de Navarra y un abogado de los morados hablan de "buena noticia"

Conceden el tercer grado a tres de los condenados por dar una paliza a dos guardias civiles en Alsasua

Podemos no ha tardado en jalear y aplaudir el paso al tercer grado penitenciario de tres de los radicales que apalizaron a dos guardias civiles y sus parejas en Alsasua (Navarra) en 2016. A través de las redes sociales, el portavoz de la formación morada en el Parlamento navarro, Mikel Buil, ha hablado de «una buena noticia que no nos puede hacer olvidar la tremenda injusticia que se está cometiendo con estos chavales».

Por su parte, un miembro del equipo jurídico del partido de Pablo Iglesias, Alejandro Gámez Selma, se ha pronunciado en la misma línea: «Tarde, pero hay que celebrar esta noticia: Los chicos de Altsasu ya están en tercer grado penitenciario y pueden acceder a permisos», ha subrayado.

Este jueves se ha sabido que tres de los condenados por la agresión a dos guardias civiles en Alsasua en octubre de 2016 han obtenido el tercer grado, una situación a la que accederán a partir de este mismo viernes, según ha hecho público la plataforma en apoyo de estos radicales.

Así, el colectivo ‘Altsasu Gurasoak’ que agrupa a las familias de los condenados de Alsasua ha colgado el siguiente mensaje en Twitter: «Esta mañana los funcionarios de la cárcel de Zaballa han comunicado a nuestros hijos Adur, Jokin y Oihan la obtención del tercer grado». «En consecuencia, mañana mismo accederán a los permisos correspondientes a su nueva situación penitenciaria», añade el texto. Estos tres radicales fueron quienes recibieron las penas más altas en el caso en el que fueron condenados otros cinco proetarras, informa Ep.

El pasado mes de octubre, el Tribunal Supremo rebajó las penas a los ocho condenados, dejándolas en una horquilla de entre un año y medio y 9 años y medio de prisión por los delitos de atentado a agentes de la autoridad, lesiones, desórdenes públicos y amenazas, sin apreciar delito de terrorismo como sí planteó la Fiscalía en un principio, aunque luego renunció a esta petición.

Durante la vista pública celebrada en el Supremo para escuchar las conclusiones de las partes, el fiscal Álvaro Redondo defendió, en todo momento, que el ataque a los dos guardias civiles ocurrió por lo significa la «institución del Estado» a la que representan. «La Guardia Civil asume unos valores constitucionales que pueden ser objeto de ataque y es fiel a España, al Rey y al pueblo español», subrayó Redondo. «Y los hechos probados en la sentencia dejan claro que el ataque se produjo en tanto en cuanto las víctimas eran guardias civiles», agregó.