España
Atentados Barcelona y Cambrils

La investigación prueba que Oukabir organizó el 17-A: aparcó la furgoneta en Vic poco antes de la masacre

  • Joan Guirado
  • Corresponsal de Gobierno y Casa Real. Siguiendo la actividad del presidente y líder del PSOE, Pedro Sánchez, y del Rey de España. También política catalana.

Driss Oukabir organizó la masacre del pasado 17 de agosto en Barcelona, tal y como prueba la investigación: el terrorista aparcó en Vic una de las furgonetas que habían sido alquiladas poco antes de que Younes Abouyaqooub irrumpiese en La Rambla provocando la matanza.

La versión de Driss Oukabir ha ido cambiando permanentemente, desde que una patrulla de seguridad ciudadana de los Mossos de Escuadra le detuvo en las calles de Ripoll, la tarde del 17 de agosto del 2018. En el momento de su detención “estaba nervioso”, según explica por primera vez a un medio de comunicación uno de los agentes que trató con él las primeras horas de su detención.

Lo primero que dijo Oukabir cuando fue detenido y ya sabía lo que habían hecho sus compañeros en Barcelona, relata este agente a OKDIARIO, es que su hermano Moussa le había robado la documentación y la había utilizado para reservar y retirar las furgonetas reservadas en Telefurgo. Driss mentía y los Mossos que le custodiaban lo sabían. Pero no fue hasta unos días más tarde, ante el juez Fernando Andreu y en la Audiencia Nacional, cuando Oukabir cambió su versión por primera vez, y dijo que tenia conocimiento del alquiler de las furgonetas pero que aquella misma mañana del atentado, llamó a su hermano para saber si las habían devuelto correctamente. El cambio de versión, consciente que la primera no era creíble, tenía voluntad auto exculpatoria. Pero volvía a mentir.

Y es que según ha podido saber este periódico, Driss Oukabir acompañó a su hermano Moussa, Younes Abouyaqooub y a dos personas más, el día anterior, a recoger las furgonetas. Younes se llevó la que iba a nombre de Driss, con matrícula 7086 JWD y él se llevó la otra. Luego, Driss y Younes se fueron a una cafetería de Las Ramblas a tomar un cortado. Aparcaron una de las furgonetas delante la puerta, desde donde observaban todo lo que ocurría dentro y fuera el establecimiento. Una vigilancia clave para lo que estaban a punto de hacer.

De camino a Ripoll, donde la noche previa de los atentados durmieron la mayoría de los terroristas, Driss Oukabir se paró en una cafetería situada junto a una gasolinera en la C-17, en Tona, a medio camino entre su localidad de residencia y Barcelona. De su parada en este establecimiento se acuerda a la perfección un camarero, que el día después reconoció su cara en los medios de comunicación y alertó a la policia de que había estado allí el día anterior.

El día de los atentados, Abouyaqooub y Mohamed Icham se desplazaron desde Ripoll hasta Parets del Vallés a recoger otra furgoneta en la empresa Ruzafa. Minutos después, a las 12:50, una cámara de una oficina de CaixaBank capta a Abouyaqooub retirando dinero en efectivo del cajero. Allí se separan. Icham conduce hasta Riudecanyes, centro de operaciones tras la explosión de Alcanar, aunque de camino Icham tiene un choque en la autopista y deja la furgoneta allí aparcada. Un rato más tarde le recogen el resto de compañeros que estaban en la demarcación de Tarragona con el mismo Audi A3 negro con el que cometieron el atentado de Cambrils.

Abouyaqooub por su parte había quedado en las afueras de Barcelona sobre el mediodía con Driss Oukabir, que tenía la otra furgoneta. Iban a improvisar, cada uno con una furgoneta, y ese sería el último momento en el que se verían. Pero Driss no estaba.

Horas antes había llamado a la central de reservas de Telefurgo para cambiar el nombre de la reserva sin decir nada al resto de compañeros de la célula. No lo pudo hacer y, en ese momento, se subió al vehículo que tenía en su poder y tras unos cuarenta kilómetros al volante, la aparcó en un polígono industrial de Vic (Barcelona). Prácticamente a la misma hora que Younes Abouyaqooub decidía cumplir con su plan inicial de matar, al precio que fuese y aunque algunos miembros de la célula ya no pudiesen participar de los ataques -bien porque estaban muertos o porque habían decidido dar un paso atrás, como Oukabir-, Driss se subía a un tren que partía de Vic a las 15:19 y que le dejó en Ripoll a las 15:57, media hora antes que Abouyaqooub sembrara el terror en las Ramblas de Barcelona.