Economía
Autónomos

Ser un autónomo jubilado sale a pagar: 916.000 pensionistas sobreviven con ingresos inferiores al SMI

Una gran parte de los trabajadores por cuenta propia que ya se han retirado no han podido acumular patrimonio ni ahorros para poder contrarrestar los bajos ingresos de sus pensiones. Esta es una de las principales causas por las que más del 70% de los autónomos jubilados sobreviven con ingresos muy por debajo de los que en este momento se perciben en el SMI. Y es que, durante muchas décadas, el 84% del colectivo ha infracotizado y no siempre por necesidad.

La cuantía media de las pensiones de jubilación del colectivo es de 835 euros mientras que en el caso del régimen general la media es de 1.403 euros mensuales, 568 euros de diferencia. Una disparidad de cuantías que retrata la situación de muchos autónomos, que pese a la subida de su pensión en 2022, ven como sus ingresos no dan para hacer frente al cada vez más elevado coste de la vida, ya que sigue siendo muy inferior al Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que tras el acuerdo entre Yolanda Díaz y los sindicatos, se ha establecido en 1.000 euros.

«El nuevo sistema de cotización está llamado a corregir esta anomalía del sistema, las cotizaciones se ajustarán estrictamente a los rendimientos de actividades económicas, empresariales y/o profesionales que se declaren en renta por las actividades desarrolladas. Evidentemente esto implicará que, en términos porcentuales, se reduzcan las cifras que actualmente reflejan las estadísticas del Ministerio de Inclusión sobre las cotizaciones en base mínima, mejorando las pensiones de jubilación del futuro», afirma Eduardo Abad, presidente de UPTA.

Para que un autónomo pueda cobrar el 100% de la pensión tiene que tener 65 años y un mínimo de 37 años y seis meses cotizados, dado que la Seguridad Social va otorgando un porcentaje mayor de la base reguladora en tanto en cuanto se incrementan los años cotizados. Con 15 años se tiene derecho a la pensión mínima o al 50% de la base reguladora y, a partir de ahí, todo depende de la cotización: por cada uno de los siguientes 106 meses se consigue un 0,21% de la base reguladora y por cada uno de los 146 meses siguientes se tiene otro 0,19% extra.

¿Cómo aumentar la pensión?

Uno de los métodos más utilizados por los autónomos es la jubilación demorada. A partir de este año, los trabajadores podrán elegir entre un 4% de la base reguladora o un pago único de todo el tiempo que haya cotizado más allá de la edad de jubilación, y que puede llegar hasta los 10.000 euros.

Otra de las formas que permite aumentar la cuantía de la jubilación es contabilizar el cobro de una parte de la pensión con el hecho de estar trabajando, ya sea por cuenta ajena o propia. La jubilación flexible establece el cobro de la pensión, la cual será inversamente proporcional a la reducción de jornada del trabajador. De acuerdo con este método, el autónomo sólo puede tener una jornada de entre el 50% y el 75% mientras cobra una cuantía máxima del 50% de una pensión de jubilación.

Para todas aquellas personas que no tienen opción de cotizar, ya sea por pérdida de la prestación o por haber cotizado por debajo de la base mínima establecida, y deseen generar o ampliar las cotizaciones previas pueden firmar un convenio especial con la Seguridad Social. El requisito más importante para suscribirse a este convenio consiste en tener cotizado, como mínimo, 1.080 días durante los 12 años antes de solicitar dicha prestación por jubilación.

Por último, existe la posibilidad de compensar ciertos periodos sin cotización en el momento del cálculo de la pensión, a través de la integración de lagunas. Esta es una ayuda está destinada a aquellas personas que no tienen algún periodo cotizado en su vida laboral o se encuentran por debajo de la base mínima exigible por la Seguridad Social.