Economía
Trabajo

La fecha en la que entrará en vigor la cotización de los becarios

Qué cotizaciones tendrán los becarios y cuándo comenzarán a ser obligatorias

¿Cómo gestionar a un becario o alumno en prácticas?

Las prácticas no laborales son aquellas que forman parte de un programa de formación académica, ya sea universitaria o de formación profesional, y que se realizan en empresas, entidades o instituciones públicas o privadas, con o sin remuneración. Estas prácticas tienen como objetivo complementar la formación teórica de los estudiantes y facilitar su inserción laboral pero ahora también tienen cotización, así que es importante conocer la fecha en la que entrará en vigor la cotización de los becarios y cuáles serán esas bases de cotización.

La fecha para la cotización de los becarios

El cambio normativo que afecta a la cotización de los becarios se introdujo en el Real Decreto-ley 2/2023, de 16 de marzo, de medidas urgentes para la mejora de las pensiones públicas y la sostenibilidad del sistema de Seguridad Social. En su disposición adicional quincuagésima segunda, se estableció que todos los alumnos que realicen prácticas no laborales quedarán incluidos en el sistema de Seguridad Social como asimilados a trabajadores por cuenta ajena, con independencia de si reciben o no una remuneración por dichas prácticas.

Sin embargo, la entrada en vigor de esta medida se retrasó hasta el 1 de enero de 2024, según lo dispuesto en el Real Decreto-ley 8/2023, de 27 de diciembre, de medidas urgentes para la protección social y el impulso a la actividad económica. Además, este último Real Decreto-ley desarrolló los aspectos más concretos de la cotización de los becarios, como las bases de cotización, las bonificaciones, las prestaciones y el plazo de adaptación.

Dicho plazo, según podemos leer en el Real Decreto del pasado 27 de diciembre «finalizará el día 31 de marzo de 2024». Es decir que esa será la fecha límite para comunicar a la Tesorería General de la Seguridad Social las altas y las bajas en la Seguridad Social correspondientes al inicio o finalización de las prácticas formativas no remuneradas que tengan lugar en el período comprendido entre el 1 de enero y el 20 de marzo de 2024.

Cuáles serán las bases de cotización de los becarios

En cuanto a las bases de cotización serán las siguientes:

¿Qué implica la cotización de los becarios para los distintos agentes implicados?

La cotización de los becarios supone una serie de implicaciones para los distintos agentes implicados en las prácticas no laborales: los propios becarios, las empresas o entidades que los acogen y la Seguridad Social. A continuación, se resumen las principales:

Para los becarios, la cotización implica una extensión de derechos y una mayor protección social, ya que podrán generar una carrera de cotización que les permitirá acceder a futuras prestaciones, como la jubilación, la incapacidad permanente o la muerte y supervivencia. Además, estarán más protegidos en caso de accidente de trabajo o enfermedad profesional, ya que tendrán derecho a la prestación por incapacidad temporal por estas contingencias. No obstante, la cotización de los becarios no les da derecho a la protección por desempleo, el Fondo de Garantía Salarial, la formación profesional y, en el caso de las prácticas no remuneradas, la incapacidad temporal por contingencias comunes.

Para las empresas o entidades que acogen a los becarios, la cotización implica una mayor responsabilidad y un coste económico, ya que tendrán que dar de alta y de baja a los becarios en la Seguridad Social y asumir el pago de las cotizaciones, aunque estas estarán bonificadas al 95% en las contingencias comunes. Además, tendrán que ofrecer unas condiciones dignas y una formación adecuada a los becarios, evitando que se conviertan en una forma de explotación o sustitución de puestos de trabajo. Por otro lado, la cotización de los becarios puede suponer también una ventaja para las empresas o entidades, ya que podrán contar con personal cualificado y motivado, que podrá incorporarse al mercado laboral con más facilidad y experiencia.

Para la Seguridad Social, la cotización de los becarios implica una mejora de la financiación y la sostenibilidad del sistema, al aumentar el número de cotizantes y reducir el fraude y la precariedad laboral. Según el Gobierno, se prevé que la cotización de los becarios genere unos ingresos de unos 70 millones de euros al año, que se destinarán al Fondo de Reserva de la Seguridad Social. Además, la cotización de los becarios implica una mayor equidad y justicia social, al reconocer el valor de las prácticas no laborales como una actividad formativa y contributiva.