Economía

Estos son los 10 consejos que te harán ahorrar en la factura eléctrica

Iberdrola ha iniciado una nueva campaña para fomentar el aislamiento térmico de las viviendas, algo que puede rebajar hasta un 30% el gasto energético doméstico destinado a calefacción y refrigeración.

En España, ocho de cada diez viviendas se encuentran en edificaciones de baja eficiencia energética, lo que conlleva que la mitad de la energía que se consume en los hogares se pierda hacia el exterior a través de los muros y los tejados.

Iberdrola, en este sentido, continúa desplegando acciones destinadas a ayudar a las familias españolas a reducir su consumo energético. Para ello, la compañía ha iniciado una nueva campaña para fomentar el aislamiento térmico de las viviendas, algo que puede rebajar hasta un 30% el gasto energético doméstico destinado a calefacción y refrigeración.

Para atajar estas fugas de calor y facilitar a los hogares ahorrar en sus facturas, especialmente en el contexto actual generado por los altos precios del gas, Iberdrola ha puesto en marcha este año un nuevo servicio de aislamiento térmico, a través de Smart Clima. De media, las familias destinan dos de cada cinco euros de sus costes energéticos a cubrir los gastos de calefacción y refrigeración, una cifra que puede llegar a ser mayor en las zonas climatológicas más frías. La solución de la compañía permite mitigar las pérdidas de energía de forma definitiva en un solo día y sin necesidad de realizar obras en el domicilio, ni de solicitar permisos a la Comunidad de Propietarios.

Smart Clima, una solución de ahorro sin obras ni permisos

El aislamiento se realiza rellenando con lana mineral de vidrio las cámaras de aire que se encuentran entre la cara exterior del edificio y la pared de la vivienda. Este doble tabique es habitual en la gran mayoría de residencias en España. También se puede aplicar para aislar el tejado en el caso de áticos o unifamiliares que dispongan de falso techo, así como en viviendas independentes que cuenten con una bajocubierta no habitada.

El material inyectado, fabricado con vidrio reciclado, no requiere ningún mantenimiento, es resistente al agua, insectos y roedores, mejora la protección antiincendios al ser ignífugo y proporciona un aislamiento homogéneo al tiempo que impide las corrientes de aire. Además, aísla acústicamente la vivienda de los sonidos del exterior.

Esta técnica es en la actualidad la que permite un mayor ahorro de energía por cada euro invertido. Se trata de una solución utilizada desde hace más de 30 años, con gran arraigo en países con clima continental como Reino Unido, donde se han aislado ya más de 13 millones de casas mediante el insuflado en cámara de aire.

Inversión total menor a los 1.000 euros

Con una inversión total menor a los 1.000 euros, una residencia habitual en España, un piso tipo de unos 80 metros cuadrados, puede reducir su consumo en 1.800 kilovatios térmicos al año, el equivalente a utilizar un mes y medio menos la calefacción al año, lo que con una tarifa de gas de mercado libre supone un ahorro en el recibo de unos 350 euros.

Para ayudar a los clientes interesados en aislar térmicamente su vivienda, la compañía ha creado un simulador que calcula la reducción del consumo de calefacción y facilita un presupuesto estimado, en función de las características básicas de la vivienda.

Por otro lado, el aislamiento facilita la sustitución de calderas de gas y gasoil por nuevos sistemas de climatización eficientes y sostenibles, como la aerotermia, al disminuir las necesidades térmicas de la vivienda, lo que permite la utilización de equipos de menor potencia.

Los 10 consejos de Iberdrola

1.- Cada grado de más cuenta. La sensación de confort en el hogar se consigue con 19-20ºC. La calefacción no debería superar esta temperatura en invierno. Cada grado adicional supone gastar entre un 7% y un 11% más de energía con su consiguiente aumento de coste. Por la noche es recomendable apagar la calefacción, o bajarla entre 15-17º.

2.- Termostato. El termostato es un instrumento muy cómodo, que permite tener un control total de la climatización del hogar, para evitar el desperdicio de energía. También programar la calefacción durante unas horas concretas, o hacer que los radiadores se apaguen una vez lleguen a la temperatura deseada.

3-. Ventilar “con cabeza”. La ventilación del hogar es necesaria, pero con 10 minutos es suficiente. Para ser más eficientes es mejor hacerlo en el momento del día más soleado para evitar un salto térmico y cuando la calefacción esté apagada.

4.- El mantenimiento es importante. Si los radiadores y la caldera funcionan correctamente y se revisan periódicamente, se puede evitar que gasten más energía de la deseada. Una caldera en buen estado ahorra hasta un 22% de consumo de gas. Los radiadores deben purgarse una vez al año para permitir la correcta circulación del calor.

5.- No tapar los radiadores. Colocar ropa mojada encima de los radiadores para que se seque antes es un error. Tanto esto, como bloquearlos con muebles u otros objetos dificulta que el calor se extienda por toda la estancia, hará que tarde más en calentarse y, por lo tanto, que consuma más.

6.- Aprovechar la luz del sol. Durante el día subir las persianas para que el sol proporcione luz y calor y al anochecer bajarlas para reducir o prevenir la pérdida de calor.

7.- No climatizar estancias vacías. No todas las zonas del hogar necesitan la misma temperatura, ni todas se usan con la misma frecuencia durante el día. Para ello, no se ha de poner la calefacción en habitaciones que no se estén utilizando y, en caso de ausencia prolongada, desconectar el radiador.

8.- Buen aislamiento. Una vivienda con aislamiento térmico tiene mucho terreno ganado en cuanto a eficiencia energética, ya que permite un mayor control de la temperatura tanto en invierno como en verano. Las ventanas eficientes también son clave para un buen aislamiento, pueden suponer un ahorro de entre un 15% y un 20% en la factura eléctrica. Las más eficientes son las abatibles, con doble acristalamiento y de PVC.

9.- Calificación energética tipo A. A la hora de elegir electrodomésticos, los radiadores y ventanas, hay que tener en cuenta las etiquetas energéticas. La etiqueta con calificación tipo A es la más eficiente y supondrá un importante ahorro energético en el día a día.

10.- Utilización de sistemas de climatización eficientes. Apostar por el autoconsumo y/o la aerotermia es fundamental para climatizar la casa de forma eficiente y sostenible. La aerotermia es un sistema de climatización por bomba de calor 3 en 1 que incluye calefacción, aire acondicionado y agua caliente sanitaria. Este sistema genera un 70% menos emisiones respecto a una caldera de gas y supone un ahorro energético de más del 50%. Mientras que, con el autoconsumo, simplemente colocando placas solares en el tejado, llegando a producir energía propia y ahorrar en la factura.