Federico Valverde está siendo la revelación de la temporada en el Real Madrid. El mediocentro del conjunto blanco se ha hecho con un hueco en el once de Zidane y está demostrando que es necesario para mantener el equilibrio en el equipo. Ante el Galatasaray, pese a la goleada de los madridistas, Fede volvió a ser de los más destacados, ganándose de forma definitiva la titularidad.
Zidane ha encontrado en Valverde todo lo que le faltaba a su equipo. Desde hace tiempo al técnico se le descosía el equipo por el centro del campo y no era capaz de encontrar remedio. Una situación que viene dándose desde el pasado curso, pero a la que el francés ha encontrado solución, aunque para ello haya tenido que prescindir de Modric.
Los números no dejan lugar a la duda, el Real Madrid mejora con la presencia del uruguayo sobre el césped. El equipo encuentra una estabilidad de la que carecía desde hace un año tanto en ataque como en defensa. Valverde mejora el juego de los blancos en todas las facetas. Se activan arriba, llegando con facilidad, mientras que apenas conceden atrás. Todo gracias al despliegue del charrúa sobre el campo.
El Madrid está invicto con Valverde de titular
Con Valverde de inicio los blancos no conocen la derrota. Seis encuentros en total en lo que va de curso, de los que han ganado cinco y han empatado uno. Además, en el aspecto goleador, han realizado 18 tantos y sólo han concedido dos. Se da una situación totalmente contraria cuando espera en el banquillo o cuando directamente no ha ido convocado. En los nueve partidos en los que Fede no ha sido de la partida, el conjunto madridista ha logrado la victoria en tres, el empate en cuatro y ha perdido dos, marcando 12 goles y recibiendo otros tantos.
El ‘Pajarito’ se ha convertido en uno de los salvadores de Zidane. El técnico sabía de la necesidad de un jugador que aportara músculo al equipo. Un jugador que fuese un depredador en el medio, que evitase que el equipo se rompiese en dos tras cada pérdida. Aparte de la potencia y el dinamismo que le da Valverde al ataque, sirve de gran ayuda en las tareas de contención, prueba de ello son las pocas ocasiones que conceden al rival con su presencia.
Zidane ya ha encontrado al pulmón que tanta falta le hacía en el centro. Después del rendimiento que está dando, será muy difícil sentar al uruguayo. El nivel al que está rindiendo y el sentido que le da al juego del Real Madrid le ha convertido en un intocable en el once, aunque para ello haya que sentar a todo un Balón de Oro como Modric.
