Munuera Montero compensó su posible error de la primera parte del Real Madrid-Celta de Vigo, en la cual pudo pitar penalti por derribo de Andry Lunin sobre Williot Swedberg, señalando la pena máxima a favor del equipo gallego en el descuento del partido. Raúl Asencio, en una disputa por el balón dentro del área, se llevó por delante a Bamba, autor del primer gol de los celestes, y el árbitro no dudó en pitarlo.
El Santiago Bernabéu se quedaba mudo después de que el Real Madrid fuera ganando 2-0 y Marcos Alonso empatase desde los 11 metros al filo del pitido final. Munuera Montero, que se habría llevado una reprimenda por no conceder la pena máxima en la jugada más polémica del encuentro, no tuvo dudas y pitó penalti de Asencio sobre Bamba, lo cual acabó forzando la prórroga en la eliminatoria de octavos de final de la Copa del Rey.
Asencio vio la tarjeta amarilla y el Real Madrid se la iba a jugar a vida o muerte en la prórroga en una ronda en la que ya cayó eliminado el año pasado contra el Atlético en el Metropolitano. Munuera Montero pudo pitar otro penalti para el Celta por mano de Antonio Rüdiger en la prórroga, pero había fuera de juego previo y el conjunto blanco se salvó del tercero.
Munuera Montero, protagonista en el Real Madrid-Celta
Acto seguido, Rüdiger mandó un balón al palo en un córner, pero al segundo tiempo de la prórroga seguía sin haber ningún equipo por delante en el marcador.
