La Liga Santander entra en sus últimas 11 jornadas. Son las mismas que quedaban el pasado año, cuando el fútbol se paró a consecuencia de la pandemia. En su reanudación, el Real Madrid firmó un final de curso perfecto, ganando 10 partidos consecutivos y proclamándose campeón a falta de una jornada, en la que empataron frente al Leganés. Aquella racha les llevó a sacar siete puntos más que el Barcelona, que iniciaba el posconfinamiento dos puntos por encima de los blancos. Es precisamente la misma fórmula que esperan repetir en este tramo final del curso para hacerse con el título. El primer paso es contra el Celta.
Las distancias de ahora son más amplias que entonces, pero siguen por debajo de la que el equipo de Zidane logró meter al Barça en ese periodo. Los blancos están a dos puntos de los azulgranas -como entonces-, pero a seis del Atlético de Madrid, que lidera desde el comienzo del curso la clasificación. El calendario, en principio, favorece a los madridistas, que tendrán que medirse a los de Koeman y que podrían verse beneficiados por el resultado del encuentro que barcelonistas y rojiblancos protagonizarán en el Camp Nou a falta de cuatro jornadas para el final.
Como en la pasada temporada, el ritmo de la competición dará poco descanso. De hecho, es aquí donde los blancos pueden verse castigados respecto a sus competidores. La supervivencia del equipo en la Champions puede condicionar en exceso las aspiraciones de los madridistas, que saben que tendrán que hacer prácticamente pleno para luchar por la Liga y también por la máxima competición.
31 puntos de 33 posibles
El Real Madrid logró el pasado curso diez victorias y un empate que les llevó a dar el golpe definitivo al campeonato. Los blancos ganaron a Eibar, Valencia, Real Sociedad, Mallorca, Espanyol, Getafe, Athletic, Alavés, Granada y Villarreal de manera consecutiva, lo que les permitió proclamarse campeones de Liga a falta de una jornada, en la que empataron ante el Leganés. En ese periodo, el Barça se dejó puntos por ante Sevilla, Celta, Atlético y Osasuna, con tres empates y una derrota, lo que les llevó a dejarse un total de siete puntos respecto a los blancos y quedar cinco por debajo en la tabla.
Esta temporada, se suma un nuevo competidor, con el Atlético de Madrid como dominador absoluto de lo que llevamos de campeonato. Sin embargo, la mala dinámica de los de Simeone en los últimos enfrentamientos a avivado la pelea por el título. En el último mes, han visto reducida su renta de los 10 a seis puntos con respecto a los blancos y a cuatro con los culés. A eso se suma el ritmo ascendente de los dos perseguidores, lo que anima a pensar en que las opciones de los tres se mantendrán abiertas hasta el final.
En ese periodo, el conjunto blanco se medirá a Celta, Eibar, Barça, Cádiz, Betis, Getafe, Osasuna, Sevilla, Granada, Athletic y Villarreal. De ellos, hay cinco equipos que no están peleando por la parte alta de la clasificación, mientras que los culés se medirán a equipos como Real, Villarreal, Granada, Valencia y Levante, recibiendo al Atlético y disputando un Clásico y los rojiblancos harán lo propio con Sevilla, Betis, Athletic o Real, entre otros.
Solidez atrás y eficiencia arriba
El Real Madrid el pasado curso asumió su falta de gol y Zidane logró que el equipo fuese solvente en sus resultados gracias, principalmente, a un factor: la solidez defensiva. Los madridistas levantaron un muro gracias a unos imperiales Courtois y Sergio Ramos, a los que acompañaban en un gran estado de forma Varane, Carvajal y Mendy.
Gracias al trabajo defensivo, los madridistas encajaron seis goles en esos 11 encuentros -dos de ellos siendo ya campeones- y dejaron su portería a cero en seis partidos. A ello se sumó la efectividad en los momentos determinantes arriba. Tenían pocas ocasiones, pero las aprovechaban, con Benzema y Ramos como los principales goleadores en ese tramo.
Este curso, los de Zidane se aferran a ese final de temporada para remontar la diferencia con la que cuentan Atlético y Barcelona. Llegan a las 11 últimas jornadas como terceros en Liga. Sin embargo, ya han empezado a consolidar su dominio en las dos áreas. Las lesiones y ausencias han condicionado el once del técnico en estos últimos encuentros, pero se han adaptado bien a los contratiempos.
En los últimos nueve encuentros, los blancos encadenan siete victorias y dos empates. En ellos, han encajado cinco tantos, marcando otros 15, lo que les ha permitido sumar en Liga un total de 17 puntos sobre 21 y lograr la clasificación para los cuartos de final de la Champions, donde les espera el Liverpool.
Atrás, los blancos vuelven a funcionar, tras una primera mitad irregular tanto en Liga como en Europa. Courtois es el mejor jugador de los blancos en lo que va de temporada, pero además han mostrado en las últimas jornadas un gran nivel en las líneas defensivas y del centro del campo. Arriba, Benzema ha regresado de su lesión como un avión, marcando cuatro de los últimos seis goles del equipo. Todo esto les da alas para soñar con poder revalidar el título liguero.