Haaland respiró cuando levantó levantó la vista para analizar la defensa que el Real Madrid presentaba en el Etihad. Por ahí no estaba Rüdiger, su sombra de batallas pasadas, su lugar lo ocupó un joven relativamente imberbe que rindió como un veterano. Raúl Asencio ganó duelo, ordenó a la defensa, devoró al delantero noruego y llama a la puerta de Luis de la Fuente.
El seleccionador nacional no es ajeno a la actualidad deportiva, menos todavía cuando está directamente relacionada con futbolistas españoles. «Es muy buen jugador, y está teniendo continuidad, que es lo que necesitamos. Respira, está vivo, es futbolista en activo… Tiene posibilidades de ir convocado, como otros 300 futbolistas que hay», aseguró De la Fuente sobre Asencio.
El seleccionador nacional no se moja sobre la posible convocatoria del central español. «Entenderéis, y es una reflexión muy lógica, que soy feliz cuando veo que los equipos españoles tienen muchos jugadores seleccionables. Para mí el drama es que en los equipos haya pocos jugadores españoles porque yo quiero tener muchos jugadores donde poder elegir», añadió De la Fuente sobre Asencio.
El central se graduó en el pasado derbi ante el Atlético. Pura velocidad para ganar carrera a un galgo como Giuliano Simeone. Ante el Manchester City se consolidó y dio el paso el día que debía. Cuando la zaga blanca mantiene la mayoría de sus efectivos en la enfermería, emergió para frenar al equipo de Guardiola. «Hizo muy buen partido y está jugando muy bien. Es difícil entrar en la Selección porque hay muy buenos jugadores», detalla Luis de la Fuente durante una nueva edición de los Desayunos de la Asociación de la Prensa Deportiva.
Con el delantero noruego no se arrugó lo más mínimo. Haaland intentó intimidarle a base de agarrones, pero el canterano se rebeló y no dudó en quitárselo de encima a manotazos. «Tiene mucha personalidad, ha demostrado que es un jugador que puede estar en el Madrid, lo está haciendo muy bien», aseguraba Courtois al final del partido. Asencio dio 46 pases bueno, sólo tres malo y ya llama a la puerta de Luis de la Fuente.