El alma del Real Madrid se rompió en la última jugada del partido que enfrentó a los blancos contra el Villarreal en el estadio Santiago Bernabéu junto al ligamento cruzado de Dani Carvajal. Una pugna más. Un choque más. Pero nada fue como siempre. El lateral derecho peleaba por una pelota con Yeremy Pino, por la última pelota del encuentro. Peleaba por pura profesionalidad, por pura garra. Y es que, en el marcador, ya poco iba a importar dónde acabase ese balón. En ese momento, toda la mala suerte se cruzó por delante de un jugador diferencial que estaba viviendo el mejor momento de su carrera a sus 32 años.
Carvajal fue a despejar un balón, mientras que el jugador del conjunto castellonense iba a evitarlo. Con la pierna en el aire, Pino se puso entre medias y el madridista acabó metiendo su pierna entre el cuerpo de su rival. Esa acción provocó que la rodilla se le fuera hacia dentro, provocándole un feo gesto. Inmediatamente, el lateral derecho pegó un grito de dolor que retumbó en todo el Bernabéu y, mientras que estaba en el césped llamando a las asistencias, no paraba de llorar. La imagen era más que clara y muy dura. En ese momento, todo apuntaba a una lesión grave. Los compañeros que fueron a consolarle rápidamente se percataron de la preocupante situación. Se intentó poner en pie, pero no había estabilidad en esa rodilla, por lo que tuvo que abandonar el terreno de juego en camilla. El silencio se apoderó del coliseo madridista.
Minutos después, comenzaron las reacciones y todos los protagonistas coincidían en señalar la preocupación del momento. Cualquier lesión grave es un palo para un vestuario, pero cuando el que la sufre es un jugador como Dani Carvajal la pena es, si cabe, mayor. El canterano no es uno más, es el alma de un equipo. Un hombre que entiende a la perfección lo que significa jugar en el Real Madrid y necesario en todos los momentos, dentro y fuera del terreno de juego.
Un vestuario hundido
«Cuando pasa algo así a un jugador como Dani, siempre motivado, afecta a todos los jugadores y a todo el equipo. Hay que reaccionar. El año pasado reaccionamos muy bien a las lesiones que tuvimos y este año tenemos que hacer otro esfuerzo para que las lesiones sean una gran motivación para el resto de la plantilla, como ocurrió el año pasado», aseguraba Ancelotti en rueda de prensa.
«Esperemos que sea lo menos posible, porque es un jugador muy importante para nosotros», aseguraba Bellingham. «Solo importa Dani, no la victoria», decía Valverde. «Que te recuperes pronto capitán. Estoy seguro de que volverás fuerte lo más pronto posible», escribía en redes sociales Güler. El impacto en el vestuario era total.
En las próximas horas el Real Madrid comunicará el alcance exacto de una dolencia que ha partido el alma de un equipo que se está acostumbrando a lidiar con este tipo de tragedias deportivas. No obstante, Carvajal ya informó de que tiene rotura del ligamento cruzado y tendrá que ser operado. El curso pasado fueron tres lesiones graves, mientras que este curso ha caído el segundo capitán. Un jugador insustituible.