Carlo Ancelotti ha llegado a Arabia Saudí con el objetivo de ganar el primer título del año, una Supercopa de España considerada menor, pero que reparte alegrías y disgustos con los grandes a partes iguales, y con dos dudas que tendrá resolver en las próximas horas. Una, obviamente, está en la portería, mientras que la otra está en la defensa.
Lunin o Kepa. Kepa o Lunin. Esa es la cuestión. Ante el Mallorca, en el primer partido de este 2024, el elegido fue el ucraniano. Portería a cero y un gran rendimiento. Ante la Arandina, en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, Ancelotti se decantó por el vasco, que tuvo poco trabajo y en el gol que recibió en los minutos finales poco pudo hacer.
La duda es quién será el portero del Real Madrid ante el Atlético de Madrid en semifinales. Un partido a todo o nada, donde el que gane jugará la final el próximo domingo y el que pierda regresará a la capital de España antes de lo deseado para preparar el encuentro que le enfrentará el próximo jueves otra vez a su enemigo más íntimo.
«El portero que juegue en la Supercopa no será el titular. Ambos lo están haciendo muy bien», aseguraba Ancelotti tras la victoria del Real Madrid frente a la Arandina en Copa del Rey. El entrenador italiano, lejos de cerrar el debate, lo dejó todavía más abierto. Posiblemente, para él no haya dudas, pero la realidad es que el madridismo se pregunta quién será su guardameta ante los de Simeone.
Lunin parte con ventaja
Pocos podían imaginar antes del pasado 8 de noviembre esta situación, pero la realidad es que ese día todo cambió en la portería del Real Madrid. Kepa saltó a calentar como un día más, pero sintió una molestia que desembocó en una lesión muscular que abrió a Lunin de par en par la puerta del conjunto blanco. Una oportunidad que el ucraniano se ha encargado de aprovechar.
Lunin partía con mucha desventaja. Daba igual lo que hiciese, ya que Ancelotti tenía claro que cuando Kepa se recuperase iba a ser el portero titular. Un pensamiento que hizo público tras la victoria del Real Madrid frente al Cádiz. «Si Kepa está disponible, Kepa va a jugar», fue el mensaje que transmitió el italiano. Un mensaje que se vio obligado a ir matizando con el paso de los partidos. No le quedó otra.
Los números de Lunin durante la ausencia de Kepa por lesión fuero, simplemente, impresionante. Posiblemente, también sorpresivos. El ucraniano demostró una fortaleza mental, una profesionalidad y una calidad que le han valido para abrir un debate que estaba totalmente cerrado desde la jornada 3 de Liga, cuando Kepa se estrenó ante el Celta de Vigo y Lunin, tras dos partidos en los que los blancos ganaron y sólo recibieron un gol, pasó al banquillo.
Ahora, a pesar de lo que asegura Ancelotti, que quiere quitar hierro a su decisión, la realidad es que la elección que tome ante el Atlético de Madrid pesará. El italiano también dejó claro que sacará el mejor equipo para estar en la final y en juego hay un título más o menos importante, pero que el Real Madrid prefiere que descanse para la eternidad en las vitrinas del estadio Santiago Bernabéu. Y la realidad es que Lunin parte con ventaja.
La defensa, la otra incógnita de Ancelotti
El once del Real Madrid para medirse al Atlético de Madrid está claro a falta de conocer pequeños detalle. Uno es la portería y el otro la defensa. Ancelotti tiene claro que Carvajal será el lateral derecho, Rüdiger el central, en principio, Nacho su compañero, ya que la opción de Tchouaméni en la zaga parece descartada, y la lógica dice que Mendy será el lateral izquierdo.
El francés está recuperado y es un jugador muy importante para Ancelotti. Siempre que está bien juega y ante el Atlético de Madrid apunta a titular. A pesar de que el deseo del Real Madrid es venderle este verano, la realidad es que Mendy para Carletto es un jugado capital. Y lo es porque con él en el campo los blancos son más sólidos.
Por lo tanto, si la lógica pesa por encima de todo, Ancelotti tendrá que sacrificar a alguien y el que más opciones tiene de ir al banquillo es Camavinga, tal y como sucedió en el Clásico de Liga. Si el francés no tiene sitio en el lateral izquierdo, en la medular con el regreso de Tchouaméni y el gran estado de forma de Kroos también lo tiene muy complicado. Por lo tanto, lo normal es que el italiano apueste por dejar en el banquillo al galo, que será importante a lo largo de un partido que se antoja muy largo para ambos conjuntos. Los derbis suelen ser de desgaste y el físico del madridista puede ser determinante.