La plantilla del Real Madrid afrontó el duelo ante el Eibar en un momento físico excelso teniendo en cuenta todo lo sucedido en los últimos meses, pero la exigencia y presión de la lucha por el título también se siente en las piernas. El calendario tortuoso previsto para finalizar la Liga obliga a una recuperación a toda velocidad y en estos días en Valdebebas se tendrá precaución extrema con los jugadores que salieron ‘tocados’ el domingo y que el jueves tendrán que disputar otra ‘final’ contra el Valencia. En la sesión de recuperación del lunes, los suplentes hicieron sesión de campo mientras que los titulares pisaron el césped para hacer carrera continua y después se ejercitaron en el gimnasio. Carvajal y Bale estuvieron al margen. El galés sufrió una sobrecarga contra el Eibar y mañana entrenará con el grupo.
El Real Madrid dejó buenas sensaciones en los primeros 45 minutos ante el Eibar pero tras el descanso llegaron las primeras noticias negativas en relación al estado físico de los jugadores. El primero de ellos fue Carvajal, que fue sustituido tras la primera parte después de haber sufrido una torcedura, según confirmó Zidane en la rueda prensa posterior al choque. El lateral fue cambiado por precaución y con la mente puesta en el duelo ante Valencia y la Real Sociedad. El daño parece que no reviste novedad y según su evolución de estos días se optará por darle descanso pensando en el trascendental partido de Anoeta. De primeras, en la sesión del lunes no saltó al césped y se quedó al margen en las instalaciones junto a un Gareth Bale que también terminó el choque con una sobrecarga (a pesar de que sólo jugó 29 minutos). Eso sí, en un principio estaría para el duelo ante el Valencia.
Tras la sustitución de Carvajal, llegó la de Sergio Ramos. El capitán, después de realizar una primera parte para enmarcar también se tuvo que ir al banquillo ubicado en la grada tras sufrir una sobrecarga en el muslo de la pierna derecha. El propio central andaluz le quitó hierro al asunto a la conclusión del partido y, con los cuidados oportunos durante la semana, estará en el partido ante el Valencia. Ramos nunca se arruga y, salvo que las lesiones se lo impidan, estará en las finales que le restan al Real Madrid de cara a la lucha por el título.
Con más precaución llevan en el Real Madrid la situación de Hazard. De cara al partido ante el Eibar había un pacto encubierto de disputar una hora del choque y sobre el minuto 60, Zidane le sacó del campo pensando en lo que se viene en las próximas semanas. Después de cuatro meses sin jugar, el belga demostró de lo que es capaz mientras estuvo en el campo y acabó el partido con un fuerte golpe en su maltrecho tobillo derecho. El entrenador galo podría optar por darle descanso ante el Valencia pensando en Anoeta, pero habrá que ver su estado en las sesiones de martes y miércoles.
Precaución con Marcelo y Modric
De cara al partido contra el Valencia, en el cuerpo técnico de Zidane también pondrán atención durante estos días en el estado físico de Marcelo y Modric. El brasileño estuvo a punto de ser sustituido en la segunda mitad después de sufrir un mareo, pero finalmente pudo acabar el choque sin problemas. No hay que descartar que el brasileño también tenga descanso el jueves y Mendy, si no suple a Carvajal en el lateral derecho, entre en su lugar.
En el próximo partido en el Di Stéfano también podría rotar un Modric que acabó fundido y fue sustituido a diez minutos del final. Valverde, que entró en los últimos instantes, podría ser el que ocupe su lugar contra el Valencia. Antes del parón, y teniendo en cuenta sus 34 años, Zidane dosificó al croata con mano izquierda y en esta recta final de campeonato seguirá haciendo lo mismo. El plan ‘B’ puede volver contra un Valencia que llegará a Madrid con dos días más de descanso que los blancos.