José Luis González González dio la nota desde el VAR, cuando en el minuto 42 del partido que medía al Real Madrid y al Rayo en Vallecas. El colegiado no quiso intervenir en el encuentro para avisar al árbitro de campo, Isidro Díaz de Mera Escuderos, para que fuese a revisar una posible agresión sobre Vinicius. El delantero brasileño se llevó un tortazo en la cara por parte de Baillu, que no fue sancionado ni con falta, ni mucho menos con tarjeta.
González González sí que había intervenido dos minutos antes, en el 40, para anularle al Real Madrid el primer gol del partido, por fuera de juego de Casemiro. Un gol que fue muy discutido por parte de los jugadores franjirrojos al considerar que el brasileño cometía falta y bajaba el balón con la mano. Al final, fue la posición del mediocentro lo que hizo que, por poco, no subiera al marcador.
Cabe recordar que Baillu ya cometió una acción muy discutida en el choque entre ambos conjuntos en la primera vuelta. Entonces, el Real Madrid se impuso por 2-1 en el Santiago Bernabéu y acabó sufriendo, pero pudo llevarse un resultado más holgado si desde el VAR hubiesen visto el penalti por manos tras un remate de Hazard.