Este Real Madrid ya juega como un equipo. Esto es algo que quedó demostrado en la repesca de la Champions frente al Manchester City y se corroboró nuevamente este sábado viendo el gol que adelantó a los blancos contra el Betis en el partido de la jornada 26 de Liga. Brahim Díaz fue el autor, pero el tanto hay que apuntárselo a todos los que participaron en la jugada, especialmente a Kylian Mbappé, con un jugadón previo, y a Ferland Mendy, que subió hasta el área pequeña para asistir al marroquí, que marcó a placer con la pierna derecha.
Brahim volvió a aprovechar su oportunidad sin Jude Bellingham poniendo el 0-1 a los diez minutos de juego en el Benito Villamarín. El mediapunta hizo de Mbappé tras una gran jugada individual del francés, que vio completamente desmarcado en el área a Mendy y le mandó un pase genial después de regatear a varios defensas del Betis. El lateral dudó si chutar, pero vio la opción más lógica que era dársela con su zurda al ’21’ y este sólo tuvo que esforzarse en llegar y mandarla a la red.
Todo se torció para el Real Madrid a partir del minuto 34, cuando Johnny Cardoso, completamente solo sin marcaje, hizo el gol del empate en un córner del Betis. Thibaut Courtois no salió, nadie le defendió y el brasileño anotó de cabeza y a placer. Y ya en la segunda parte, en el 54′, Isco Alarcón le dio la vuelta al partido a favor del cuadro verdiblanco.
Del gol de Brahim a la remontada del Betis
El malagueño marcó de penalti tras un claro derribo en el área de Antonio Rüdiger sobre Jesús Rodríguez, que se marchó en solitario hacia la portería blanca. El árbitro Hernández Hernández ni se lo pensó e Isco se encargó de transformar la pena máxima con un buen disparo ajustado al palo derecho. Además, lo celebró por todo lo alto pese a militar en el Real Madrid durante nueve temporadas, e incluso se dirigió a la grada para besar a su mujer, Sara Sálamo.