El pasado 14 de diciembre, los seguidores del Real Madrid esbozaron una sonrisa al percatarse del rival del equipo en los octavos de final de la Champions League: el Atalanta. Un club que había dado la sorpresa en la última edición, pero que marchaba octavo en la Serie A y estaba sumido en una crisis institucional debido a algunos problemas en el vestuario. Todo ello le colocaban como una de las cenicientas del sorteo, pero nada más lejos de la realidad.
Después de unos meses muy difíciles a nivel deportivo e institucional, ahora todo son buenas noticias en el club italiano. El Atalanta acumula un total de 14 encuentros sin conocer la derrota, con un balance goleador de 34 goles a favor y tan sólo 11 en contra en esos 14 últimos partidos. Sus victorias ante la Roma y ante el líder, el Milan de Stefano Pioli, han servido de aviso al Real Madrid, que no pasa precisamente por su mejor momento. Los italianos han pasado página de los problemas entre el Papu Gómez, vendido esta semana al Sevilla, y el técnico Gasperini y atraviesan su mejor momento de la temporada.
Ilicic ha recuperado la sonrisa
Josip Ilicic fue una de las grandes sensaciones de la pasada Liga de Campeones. El público europeo alucinó con su nivel en la eliminatoria ante el Valencia, en la que anotó cinco tantos en dos partidos. Sin embargo, tuvo problemas psicológicos tras el confinamiento, hasta el punto de estar apartado del equipo y plantearse dejar el fútbol profesional.
Todo ello ya es historia para el esloveno, que ha vuelto a recuperar la sonrisa. De hecho, completó una exhibición ante el Milán con gol incluido: «Hoy soy un hombre feliz: hago todo lo que hamo, el fútbol es lo más importante para mí, no digo de la vida, porque tengo familia», aseguró Ilicic. El 72 es una de las claves de este Atalanta, que es una máquina a nivel ofensivo, aunque atrás sufre mucho.
El 24 de febrero, Atalanta y Real Madrid se enfrentarán en Bérgamo en la ida de los octavos de final de la Champions League. Una eliminatoria que a priori se presentaba como bastante asequible para los madridistas, si bien el nivel demostrado por el club italiano durante las últimas semanas invita a pensar que será un cruce muy duro para los de Zinedine Zidane.