Dice la RAE que un manicomio es un «hospital o clínica donde se trata a los enfermos mentales que han perdido la razón». Casa perfectamente con lo que se va a encontrar el Arsenal el miércoles, cuando haga acto de presencia en el estadio Santiago Bernabéu. Una auténtica casa de locos en la que habrá más de 80.000 almas entregadas a la fe, porque si deben pensar con la cabeza y el raciocinio, son plenamente conscientes de que la gesta es prácticamente imposible. Pero en noches como esta se actúa con el corazón, y de eso el madridismo sabe un rato.
El Arsenal piensa que ha llegado a Madrid para disputar la vuelta de los cuartos de final de la Champions. Y razón no les falta. Pero para lo que no están preparados es para que, además de ese partido, también deban enfrentarse a un escenario irracional, donde las cosas pasan sin saber muy bien el cómo ni el cuándo. De repente, sin previo aviso, el Bernabéu entra en trance con sus 80.000 almas y sus once jugadores. En ese instante, ya da igual lo que quiera hacer el rival, su destino está escrito. Lo pueden explicar, o no, Bayern, City, Chelsea o PSG en los últimos años. Ahora, veremos si el Arsenal es capaz de evitar la locura o cae en la trampa madridista, de donde casi ninguno sale.
Para ello, el Real Madrid se prepara para una noche única, mágica. Ya hemos dicho que la razón no tiene cabida, y solo importa el corazón. En ese escenario es donde club y afición lo darán todo para llevar a los hombres de Ancelotti en volandas hacia la gesta de remontar, nada más y nada menos, que el 3-0 recibido en el partido de ida.
Todo listo para la remontada
El club lo ha puesto y seguirá poniendo todo de su parte: vídeos motivacionales, recuerdos del pasado donde se fue tremendamente feliz, y un Bernabéu preparado para la ocasión. La afición, simplemente, cree de manera irracional. Sin buscarle sentido ni explicación, simplemente acudirán al coliseo madridista para lograr la remontada. Nadie disfruta más que un aficionado del equipo blanco en este tipo de días.
Los jugadores del Real Madrid sentirán el calor de los suyos desde que encaren la cuesta de Concha Espina hacia la plaza de los Sagrados Corazones, donde se encontrarán con miles de aficionados que no dudarán en dar el primer aliento. La locura se trasladará al interior del estadio, donde se seguirá con el ritual. El partido de la grada empieza en el calentamiento, sigue con las alineaciones y continúa con un mosaico que se podrá ver en el fondo sur, en el que se mostrará la imagen de un dios, un ajedrez y las últimas víctimas de este sicario llamado Real Madrid: City, Chelsea, Bayern o PSG. Luego, el partido comenzará y la grada será el jugador número 12, el que tratará de marcar un gol o, por lo menos, ayudar a sus jugadores a que lo marquen.