El Barcelona no quiere que se repita lo que le sucedió al primer equipo masculino durante el partido de cuartos de final de la Europa League la temporada pasada ante el Eintracht de Frankfurt, cuando el Camp Nou se tiñó de blanco, plagado de aficionados alemanes que hicieron a su equipo jugar como local. El Barça no quiere volver a repetir una imagen similar y comienza a dar pasos en ese sentido con el equipo femenino en el Estadio de fútbol Johan Cruyff para el Clásico ante el Real Madrid y también ante el Atlético de Madrid.
«Información importante: Prohibida la compra para aficionados del Real Madrid. Se denegará el acceso al estadio a aficionados con vestimentas o emblemas del Real Madrid», es la venta emergente que aparece cuando acudes a la página web del Barcelona para comprar las entradas del próximo Clásico, que aún no tiene ni hora ni fecha fijada, aunque se debe disputar el fin de semana del sábado 25 y domingo 26 de marzo de 2023, mismo mensaje para el partido siguiente en territorio culé, ante el Atlético de Madrid.
De hecho, las entradas para el Clásico de la jornada 23 de la Liga F están actualmente agotadas, ya no hay disponibles pese a que el horario no está aún fijado. «Se ha alcanzado el límite de aforo establecido. En este momento no hay entradas disponibles para la venta, inténtalo más tarde. Por favor, vuélvelo a intentar más adelante», asegura el Barça en su página web a la hora de adquirir entradas para este partido.
Las explicaciones del Barça ante este llamativo mensaje, que ya está generando mucho revuelo en las redes sociales, es el siguiente: «En cumplimiento de lo previsto en: Ley 19/2007, de 11 de julio, contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte y su reglamento de desarrollo, así como el Reglamento Interno del recinto deportivo del FC Barcelona. Con el fin único de salvaguardar la separación efectiva de aficiones y de preservar la seguridad en la celebración del evento, los aficionados del equipo visitante no podrán adquirir entradas en las zonas reservadas a la afición local».
Además, apuntan algunas directrices como que «los aficionados del equipo visitante deben adquirir sus entradas exclusivamente a través de su respectivo club», que «se denegará el acceso a la zona de aficionados locales con vestimenta o simbología del equipo visitante», que de acceder al estadio «con vestimenta o emblemas del equipo visitante podrá ser reubicado o expulsado» y, por último, que «en ningún caso se realizará la devolución del importe de la compra, ni sus gastos derivados».
Así, los aficionados del Real Madrid que quieran acudir al Johan Cruyff para ver el Clásico entre el Barcelona y su equipo tendrán que adquirir las entradas a través del club blanco, en base a las localidades que tendrán a su disposición en base al pacto entre entidades. Serán el mismo número que las que facilitó el Madrid para el encuentro en el Alfredo Di Stéfano.