Guerschon Yabusele ha roto su silencio, al igual que su compañero y capitán Sergio Llull, en la mañana de este viernes para pedir perdón por la multitudinaria pelea que se produjo en el segundo partido de los playoffs entre los jugadores del Real Madrid y los del Partizan de Belgrado. El jugador francés «lamentó profundamente» su actitud en el partido.
«Lamento profundamente mi comportamiento en el partido de anoche. El baloncesto se trata de deportividad y amistad. Mis sinceras disculpas a Partizan, un club con el que siempre hemos tenido una gran relación, a Dante Exum y su familia, a mis compañeros, a mi club y a todos los fans», decía en el comunicado.
A pesar de estas disculpas, eso no evitará una durísima y disciplinaria sanción por parte de la Euroliga en la que podría estar sin jugar un partido de Euroliga durante los próximos cuatro años. Y es que Yabusele llevó a cabo una llave más propia de la lucha libre que de otra cosa a Dante Exum, jugador australiano del Partizan. Acción que acabó con la rotura de uno de sus dedos del pie y con 21 jugadores expulsados de los 24 que había en la cancha.
Por otro lado, Punter jugador que sufrió la falta de Sergio Llull y que desencadenó la tangana, también habló en redes sociales. «No empecé esta mierda», dijo. Y es que el base estadounidense fue señalado como el que inició la pelea entre los jugadores de ambos equipo, pero él mismo se encargo de dejarlo claro.
Será este viernes cuando se conozca la sanción definitiva para todos los jugadores, pero en concreto para el propio Yabusele, que podría estar hasta cuatro años sin jugar en Euroliga e, incluso algo más como estar sancionado de por vida sin jugar en la máxima competición europea.
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