Un gran Unicaja Málaga logra su tercera Copa del Rey derrotando en la final al Real Madrid, que apenas tuvo argumentos ofensivos para discutirle el título (93-79). La trigésima se les escapó a los blancos en el Gran Canaria Arena de Las Palmas, donde el equipo de Ibon Navarro demostró con creces que a día de hoy es el más trabajado y en forma de España. Derrota del cuadro madridista de las que hacen mucho daño y ya son tres finales perdidas en menos de un año, dos de ellas ante los malagueños.
Kendrick Perry fue el hombre de la final y del torneo, llevándose el MVP tras una exhibición de triples ante el Real Madrid (27 puntos y 6 asistencias). Kravish (20) y Kameron Taylor (15, 3 y 8 rebotes) le siguieron de cerca. Mario Hezonja dejó de ser el líder para centrarse en sí mismo y lograr 10 encestes y 5 asistencias en otra mala final. Facundo Campazzo (14, 6 y 5) y Sergio Llull (14) defendieron el honor tratando de sostener a los blancos, pero no fue suficiente para luchar por el título.
El Real Madrid no dominó ninguno de los parciales y tan sólo consiguió empatar en el segundo y las desconexiones en este tipo de encuentros en torneos del KO ya son algo verdaderamente preocupante para los de Chus Mateo. Regresa hacia la capital de España con un mal sabor de boca y un panorama que se pone muy cuesta arriba, jugándose la vida cada semana a partir de ahora en la Euroliga.
Los dos últimos campeones de la Copa se medían por el título en Canarias. El partido de aficiones lo empezó ganando Unicaja con una marea verde que más que por el número de personas, que también, se hizo notar con una charanga y una fuerza inigualable. Lo que funciona no se toca: el quintento madridista era el mismo que en cuartos y semifinales. Campazzo, Alberto Abalde, Dzanan Musa, Eli Ndiaye y Walter Tavares repetían pese al mal inicio frente al Gran Canaria.
Inicio igualado entre Unicaja y Real Madrid
Salió serio un Real Madrid que se sostuvo gracias a la garra bajo el aro a la que ni Sima ni Balcerowski eran capaces de hacer frente y a dos triples de Abalde. Sí mejoro Kravish a los dos pívots cajistas con un tapón monumental al alley oop de Bruno Fernando para evitar la primera ventaja madridista y con un triple para estirar la de su equipo.
El estadounidense echó el cerrojo y consiguió que Unicaja ganase el primer asalto (18-15) en el que un Real Madrid bien atrás, pero sin lucidez en ataque no daba con la tecla para meter mano a los de Ibon Navarro. Kravish se comió a Bruno Fernando, al que no le acompañó tampoco la suerte de cara al aro y metió a Serge Ibaka, sin minutos ante el Gran Canaria.
Mejoró Unicaja con Taylor y el Real Madrid en ataque con la entrada de Hugo González y al rebote defensivo con la de Ibaka, una barrera que no pudo traspasar Yankuba Sima, por debajo de su nivel en la semifinal. Sería capitán Llull quien a 4:48 minutos del descanso daría a su equipo la primera ventaja del partido (26-27).
Pero un parcial de 8-0 de Unicaja forzó el primer tiempo muerto de Chus Mateo con un Perry que iba calentando la muñeca. A los blancos les entraban los nervios al filo del descanso y Dylan Osetkowski calentaba la final con una agresión a Musa sin la pelota en juego. Tras revisión, antideportiva y tres tiros para el bosnio, que acercaba a su equipo encestando todos ellos.
Los malagueños machacan al triple
Unicaja mantenía los tres puntos de ventaja al intermedio (39-36) tras un primer tiempo con 6 de 11 en triples (54%) y buen porcentaje en tiros de campo. Además, Sima se entonó para dar alternativa a Ibon Navarro con un Kravish espectacular. Hezonja salvó su actuación en un arranque de final sospechoso con un 2+1 en la penúltima acción con el que empataba el segundo parcial (21-21)
La segunda parte arrancaba con parcial de 9-2 a favor de Unicaja, dispuesto a adueñarse de la final. Chus paraba en busca de una solución para dar el despegue definitivo en el encuentro, pero la eficacia de los malagueños en el triple se lo estaba impidiendo por completo. Dos más, uno de Kravish y otro de Kalinoski ponía a los cajistas 12 puntos por encima (56-44), la máxima y el técnico blanco volvía a detenerlo menos de dos minutos después.
El Real Madrid se veía obligado a remontar la misma desventaja que el día anterior, sólo que esta vez debía lograrlo cuando más cuesta. Taylor volvió a irrumpir en el mejor parcial de Unicaja y se iba con 15 puntos al último cuarto, 12 de ventaja para los malagueños de cara a un asalto final que se presentaba muy complicado para el equipo blanco, pero que comenzaba sobre la bocina del tercero con mandarina de Llull (64-55).
Para que el equipo de las remontadas volviera a aparecer el de Mahón debía convertirse en la clave de todo. Unicaja paraba cada acercamiento del Real Madrid con falta, pero un nuevo triple de Llull devolvía la vida a los de Chus Mateo. El capitán lideraba la reacción blanca y se sentaba con vistas a un final apretado en el que regresar a la acción para soñar con la épica.
Perry dignifica el MVP
Pero Unicaja, con otro arreón, metió 14 puntos de ventaja y forzaba un nuevo tiempo muerto de Chus a 6:37 minutos del final (74-60). El técnico puso su mejor quintento en pista con tiradores de todas las clases y la reacción comenzaba con triples de Hezonja y Campazzo para un parcial de 2-10.
Kravish, el héroe de Unicaja, uno de ellos, seguía cortando ataques madridistas y anotando de tres. Muy difícil de frenar para un Real Madrid que no consiguió hacerlo en todo el partido. Perry tambén se animó, se puso en 22 puntos y ponía la máxima para Unicaja a 3:54 (85-70). A los cajistas ya sólo les quedaba mantener el trabajo para abrochar la tercera Copa de su historia en un festival triplista (13 de 29)