El Real Madrid es campeón de la Liga ACB por 37ª vez. Sí, lo han leído bien, ¡por 37ª vez! Los chicos de Chus Mateo culminaron una gran temporada venciendo al UCAM Murcia (73-84) después del duro mazazo de la Euroliga hace tres semanas. Desde entonces, seis partidos y seis victorias (3-0 al Barcelona y 3-0 en esta final) para llevarse el campeonato liguero con total merecimiento. Rudy Fernández se despidió del club blanco con todos los honores y entre lágrimas.
El Palacio de los Deportes de Murcia acogía el tercer partido de la final de la ACB. Un Real Madrid motivado tras las dos victorias en los dos primeros encuentros de la serie y con el deseo de convertirse en campeones por la vía rápida frente a un UCAM Murcia con la confianza de, al menos, sumar una alegría frente a su público. Habían pasado tan sólo 48 horas desde el último encuentro que se había disputado en el WiZink, por lo que iba a ser complicado de cambiar dinámicas.
Y el partido comenzó con un parcial de 0-5 que obligó a Sito Alonso a pedir tiempo muerto. El entrenador español no quería que el Real Madrid se fuera en el marcador al comienzo… y paró el partido. Fue un triple de Hezonja el detonante para pararlo. Y surtió algo de efecto, aunque los murcianos comenzaron con un fatídico 1/8 en tiros de campo. Así iba a ser complicado darle la vuelta a la eliminatoria. O mejor dicho, ganar al Real Madrid en este decisivo partido.
Los de siempre para el Real Madrid: Tavares, Hezonja, Causeur, Campazzo y Musa comenzaban el partido con el objetivo de levantar la 37ª Liga de su historia. Casi nada. El inicio de los de Chus Mateo fue muy bueno. Las caras de los blancos lo decían todo: querían ganar la Liga hoy. La seriedad era total, pero UCAM Murcia no iba a vender su piel tan fácil, y siguieron su estela durante todo el primer cuarto, que acabó con un resultado a favor de los locales (19-17).
Pero en el segundo cuarto, el UCAM Murcia puso una marcha más a la que el Real Madrid le costó seguir. Los de Chus Mateo se vieron sobrepasados y sufrieron la mayor diferencia de todo el encuentro (38-28) a falta de dos minutos para terminar la primera mitad. Entre Ennis y Radovic, los locales volvieron locos a los blancos, que se vio obligado a parar el partido para de esta manera frenar la sangría que estaban llevando a cabo los locales. Los segundos 10 minutos evidenciaron que el Madrid debía mejorar muchas cosas, especialmente las pérdidas de balón, pero tenían todavía toda la segunda mitad para reaccionar y llevarse la Liga a casa. 40-32 al descanso.
Un Real Madrid combativo
El Real Madrid salió del descanso con una actitud diferente. Musa se echó el equipo a la espalda. Su espíritu guerrillero animó al equipo, pero UCAM Murcia no daba síntomas de debilidad. La diferencia de ocho puntos se reducía ligeramente, pero los locales seguían cómodos en el encuentro con una renta de entre seis y nueve puntos. Pero es que Ennis, con 18 puntos en la mitad del tercer cuarto estaba rompiendo el partido. No sólo él, sino que todos remaban para negar al Madrid la remontada. (53-48) a falta de cuatro minutos para el final del tercer cuarto, entre Musa y Hezonja, el equipo de Chus Mateo seguía de pie.
Pero en un visto y no visto, el Real Madrid, comandado por ‘SuperMario’, realizó un espectacular parcial de 10-0 para ponerse (53-58). El Palacio de los Deportes de Murcia pasó del éxtasis y la locura al silencio total. Nadie sabía qué había pasado pero los blancos ya estaban por delante. Y así fue durante toda la segunda mitad. Los locales comenzaron a ir a remolque, y eso lo terminaron por acusar.
Los chicos de Chus Mateo, ya en el último cuarto, abrieron la brecha necesaria para que los locales no pudieran revertir la situación. La pitón picó… Y fue definitivo para llevarse la Liga a casa. UCAM Murcia lo siguió intentando hasta el final, pero sin éxito. La diferencia de 10 puntos (67-77) a falta de cuatro minutos para el final fue imposible. Pasaron los minutos y los blancos ya celebraban el título. Un título que se celebrará más si cabe por una persona especial. De nombre Rodolfo, más conocido como Rudy, y de apellido Fernández, que se retira de este deporte con todos los honores.
