Bebés

Viral: nace un bebé cuatro años después de la muerte de sus padres

La ciencia avanza a pasos agigantados y precisamente por ese motivo consigue dejarnos con la boca abierta en más de una ocasión. Y eso es lo que ha sucedido esta mañana cuando nos hemos despertado con la noticia del nacimiento de un bebé cuatro años después de la muerte de sus padres.

Sí, como has leído. Puede parecer increíble, pero es absolutamente cierto. Sigue leyendo y descubrirás tan singular historia.

¿Dónde ha sucedido?

En China es donde ha tenido lugar tan peculiar historia. Más exactamente ha tomado como escenario la ciudad de Guangzhou, que pertenece a la provincia de Cantón situada al sur del país.

Los protagonistas

Varias son las personas que han pasado a ser noticia en todo el mundo por esta situación tan realmente peculiar:

El origen de los hechos

Algo más de cuatro años hay que retrotraerse en el tiempo para poder conocer el origen de esta historia que ha sorprendido a todo el mundo. Fue entonces cuando Shen y Liu tomaron la decisión de ser padres. Sin embargo, tuvieron complicaciones para poder conseguirlo de forma natural y optaron por recurrir a una clínica de fertilidad.

En ese centro sanitario se apostó por congelarles unos embriones que iban a ser implantados en la madre. No obstante, el cruel destino quiso que esa acción no llegara a hacerse realidad. ¿Por qué? Porque cinco días antes de que la misma se llevara a la práctica, la pareja falleció en un grave accidente de tráfico que tuvo en la zona costera de Jiangsu.

Los abuelos luchan por el nacimiento de su nieto

Como es lógico los padres de Shen y Liu se quedaron destrozados por la pérdida de sus hijos. No obstante, hubo algo que les hizo afrontar el trance y tirar para adelante. En concreto, lo que hicieron fue luchar por conseguir que viniera al mundo su nieto, el que posiblemente hubiera nacido si la muerte no se hubiera cruzado en sus caminos.

Así, iniciaran una ardua y dura batalla legal para poder tener los derechos sobre los citados embriones que se habían congelado. Tres años les costó conseguirlos. Así, en enero de 2017 se dieron cuenta de que estaban cada vez más cerca de hacer realidad su sueño de tener ese nieto que tanto ansiaban.

Sin embargo, en ese momento llegaba una complicada situación: encontrar un vientre de alquiler. Algo que no podían hacer en China, porque la gestación subrogada es ilegal. Eso les llevó a marcharse hasta Laos donde, con ayuda de una agencia especializada, dieron con la mujer que afrontaría el embarazo durante los pertinentes nueve meses.

Nace el bebé

En enero de este año 2018 fue cuando vino al mundo, en un hospital de Guangzhou, el pequeño al que se le ha dado el nombre de Tiantian. Un nombre este que significa “dulzura”.

Nada más nacer sus abuelos tuvieron que volver a luchar judicialmente, porque era necesario demostrar que era su nieto para así poder tener su custodia. En concreto, tuvieron que someterse a unas pruebas de ADN.

Hoy, 100 días después de su llegada, el pequeño crece feliz junto a sus abuelos. Estos han conseguido recuperar en gran medida la alegría y, además, sienten que tienen a sus hijos más cerca que nunca. Eso sin pasar por alto que están convencidos de que han hecho lo que a Shen y Liu les hubiera gustado.

El bebé, que tiene los ojos de su madre y el rostro de su padre, está creciendo encantado con los cuidados y atenciones de sus abuelos. Estos saben que cuando sea algo mayor tendrán que contarle su peculiar y trágica historia. No obstante, mientras ese duro momento llega disfrutan cuidándole, dándole todos los mimos del mundo y ofreciéndole el cariño que necesita.

¿Qué te ha parecido este caso que se ha convertido en viral rápidamente? Si te hubieras visto en la misma situación que esos abuelos, ¿habrías actuado como lo han hecho ellos?