Sociedad

Una trabajadora de Paul McCartney se lía a puñetazos y mordiscos con la policía en la Joy Eslava

Una empleada encargada del avituallamiento del personal que acompaña al ex Beatle Paul McCartney la emprendió en la madrugada del miércoles a patadas, puñetazos y mordiscos con agentes de la Policía Nacional y controladores de la conocida discoteca madrileña Joy Eslava, en pleno centro de la capital.

Según confirma la Jefatura Superior de Policía, los hechos tuvieron lugar en torno a las 2:45 horas de la madrugada del día 1 cuando los controladores de la discoteca requirieron la presencia de la Policía ante el violento comportamiento de la mujer, de 25 años.

Los controladores relataron a los agentes que en el Pasadizo de San Ginés, pegado a la discoteca, la mujer, al parecer en estado ebrio, les había agredido con patadas, puñetazos e incluso mordiscos.

No pudieron retenerla y salió corriendo hacia un local colindante a la discoteca, cerrado con una madera que ella llegó a romper para acceder a su interior.

Los agentes de la Policía se dirigieron al local e intentaron retenerla dentro, pero se zafó, aunque finalmente fue interceptada en la calle.

Juicio rápido y en libertad

Al parecer, la mujer se negó reiteradas veces a mostrar a los agentes su documentación, y todavía muy alterada y nerviosa, siguió dando patadas y profiriendo insultos a los policías, a uno de los cuales incluso escupió en la cara.

Dado su estado, los agentes decidieron trasladarla a un centro médico, pero allí se negó a ser atendida por los facultativos y a salir al exterior.

Otra vez consiguieron los funcionarios reducirla, la introdujeron en el vehículo policial y la trasladaron a comisaría en calidad de detenida por atentado a agente de la autoridad y por lesiones.

Este jueves se celebró en los juzgados de Plaza de Castilla el juicio rápido y la mujer pudo acudir al concierto que McCartney ofreció en el estadio Vicente Calderón.