Sociedad
Blanca Fernández Ochoa

Los insectos hallados en el cuerpo de Blanca revelan que lleva muerta desde el día 25

Los insectos hallados en un cadáver son claves en la medicina forense para determinar algunas condiciones del fallecimiento. Principalmente para establecer la data, el momento del deceso, pero también para descubrir indicios de intoxicación o sobredosis. Los analizados en el cuerpo de Blanca Fernández Ochoa han dado una pista fundamental a los investigadores: murió aproximadamente el domingo 25 de agosto.

Entre las pruebas que se han realizado a los restos mortales de la deportista Blanca Fernández Ochoa se encuentra la entomología forense. El análisis de la fauna cadavérica de tipo artrópodo que aparece en cuerpos, humanos y animales, durante su descomposición. Es una disciplina clave en la criminología.

Según ha podido saber OKDIARIO de fuentes de la investigación, los primeros resultados de la exploración parcial entomológica del cuerpo de Blanca confirmarían que la deportista murió en torno al domingo 25 de agosto. Los resultados no son concluyentes pero sí significativos, y deberán ser refrendados por otro tipo de pruebas forenses.

Pasadas unas horas desde el fallecimiento de una persona en un entorno natural, sus restos comienzan a ser colonizados por una serie de artrópodos concretos. Suelen anidar en los orificios nasales, auditivos y orales. Y especialmente en las heridas hemorrágicas, pero el cuerpo de Blanca no presentaba ninguna.

Análisis de sustancias

Esta disciplina forense, muy recurrente en la análisis criminológico, también podrá aportar datos en próximos días sobre si se produjo algún tipo de intoxicación o sobredosis de alguna sustancia. La fauna cadavérica en ocasiones se alimenta de la sangre hallada en el cuerpo y permite establecer con exactitud si contenía cantidades anómalas de algún compuesto o elemento químico.

Junto a la deportista, cabe recordar, se hallaron medicamentos recetados para sus dolencias. Principalmente carbono de litio y antipsicóticos. La investigación no ha determinado aún si se produjo una ingesta voluntaria o accidental de una dosis demasiado alta de estos medicamentos. Será algo que deberá reflejar el informe toxicológico que se espera para la próxima semana «como pronto».

De momento se desconocen datos oficiales de la autopsia, ya que el juez de Instrucción Nº 5 de Collado Villalba, responsable de la investigación, no ha dado luz verde a la publicación del informe preliminar. Los restos de Blanca Fernández Ochoa continúan en el Instituto Anatómico Forense a la espera de ser entregados a su familia para su cremación, por deseo expreso de sus hijos.