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Riesgos inesperados en la saliva de los perros: esto es lo que podría estar ocultando

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

A todos nos encanta recibir un beso de nuestro perro, ese gesto lleno de cariño que a veces se traduce en un lametón en la cara o en las manos. Sin embargo, cuando nuestros perros nos muestran afecto, no nos detenemos a pensar en lo que realmente implica. De hecho, la saliva de los perros contiene bacterias, proteínas y otros elementos que pueden afectar nuestra salud de formas inesperadas, tal y como alertan los veterinarios.

Existen estudios que sugieren que los perros pueden transferir algunas bacterias que viven en su boca, como las bacterias periodontales, a los humanos, lo que podría dar lugar a infecciones bucales o problemas relacionados con las encías. Por supuesto, la probabilidad de contraer infecciones graves a través de un beso de nuestros amigos peludos es baja pero es un riesgo que debemos considerar. Por este motivo, es recomendable tener cuidado y practicar una higiene adecuada, evitando los lametones en zonas sensibles como la cara o las heridas abiertas.

¿Qué esconde la saliva de los perros?

Uno de los aspectos más curiosos de la saliva de los perros es su capacidad para prevenir las caries caninas. Si bien  no asociamos la saliva de los animales con algo tan positivo, resulta que la saliva de los perros tiene una característica especial: es ligeramente alcalina. Esto significa que su saliva tiene un pH que ayuda a neutralizar los ácidos que suelen causar la erosión del esmalte dental. Si lo comparamos con la saliva humana, que tiende a ser más ácida, la saliva de los perros es una especie de protector natural para sus dientes. Es uno de los factores que explica por qué los perros no suelen tener caries con la misma frecuencia que las personas.

¿Sabías que la saliva de los perros no tiene un papel en la digestión como la nuestra? En los humanos, la saliva es fundamental para descomponer los alimentos, ya que contiene enzimas que inician el proceso digestivo. Sin embargo, en los perros la situación es diferente. Su saliva no contiene enzimas digestivas, por lo que no comienza a descomponer los alimentos en la boca. En lugar de ello, su función principal es ayudar a mover los alimentos hacia el esófago, facilitando su paso hacia el estómago, donde realmente comienza la digestión.

Por otro lado, es bien sabido que los perros lamen heridas y otras partes de su cuerpo, y una de las razones por las cuales lo hacen tiene que ver con las propiedades antibacterianas de su saliva. De hecho, la saliva de los perros contiene ciertos compuestos que ayudan a reducir el riesgo de infecciones menores. Estos compuestos antibacterianos son útiles cuando los perros se lamen a sí mismos o a sus compañeros de manada, ayudando a limpiar pequeñas heridas y evitando infecciones. Pero, aunque esta acción de lamer tenga beneficios, no debemos caer en el error de pensar que la saliva por sí sola puede curar todas las heridas.

Riesgos para los humanos

Aunque la saliva de los perros contiene compuestos antibacterianos que ayudan a evitar infecciones graves en ellos, esa misma saliva puede ser un vehículo para bacterias que se transmiten a las personas.

Uno de los riesgos más graves que puede derivarse del contacto con la saliva de los perros es la infección por la bacteria Capnocytophaga canimorsus. Esta bacteria se encuentra comúnmente en la boca de los perros y es inofensiva para ellos, pero en algunos casos puede transmitir infecciones graves a los humanos, especialmente si tienen un sistema inmunológico debilitado. Las infecciones por Capnocytophaga son raras, pero pueden ocurrir si un perro muerde a una persona o incluso si la saliva entra en contacto con una herida abierta en la piel.

Los perros también pueden transmitir algunos parásitos a través de la saliva Uno de los más comunes es el parásito Toxocara canis, que causa la enfermedad conocida como toxocariosis. Aunque este parásito generalmente se transmite a través del contacto con heces de perro contaminadas, también puede estar presente en la saliva de los perros que hayan ingerido huevos del parásito. Si un perro lame a una persona, especialmente en la boca o en heridas, puede haber una transmisión potencial del parásito.

La Salmonella es otra bacteria que puede estar presente en la saliva de los perros, especialmente si tienen contacto con alimentos contaminados o animales infectados. Esta bacteria puede estar en la boca de los perros que consumen carne cruda o que tienen contacto con heces de otros animales. La Salmonella se puede transferir a los humanos a través de la saliva de un perro que haya ingerido alimentos contaminados.

Finalmente, cabe señalar que algunas personas sufren reacciones alérgicas no solo por el pelo de los perros, sino también por las proteínas presentes en su saliva. Aunque muchos de nosotros asociamos las alergias caninas con la caspa de los perros, lo cierto es que las proteínas en la saliva tienen un papel mucho más importante en las reacciones alérgicas.