La insólita imagen de la princesa Leonor en su cumpleaños tras ‘soltarse la melena’
La princesa Leonor celebró su mayoría de edad con una fiesta privada en el Palacio de El Pardo.
Después de los actos institucionales, la Familia Real disfrutó de una velada íntima por el 18 cumpleaños de la princesa de Asturias.
No han trascendido imágenes de cómo fue la reunión, a la que asistió Juan Carlos I.
La entrada del Palacio de El Pardo se convirtió este pasado martes en un constante ir y venir de coches con los asistentes a la fiesta privada por el cumpleaños de la princesa Leonor. Desde poco antes de las 20:00 horas, los diferentes miembros de la familia del Rey y otros invitados fueron llegando al recinto, donde se celebró una velada íntima, tras los actos institucionales en el Congreso de los Diputados y en el Palacio Real. La imagen más buscada era, sin duda, la de Juan Carlos I de nuevo con su nieta, con la que no se le veía en público desde el año 2018, cuando se celebró el 40 aniversario de la Constitución. Sin embargo, no ha trascendido ninguna fotografía del reencuentro familiar y, hasta ahora, tampoco de la princesa de Asturias.
La Reina Letizia y la infanta Sofía en las inmediaciones de El Pardo. / Gtres
Los Reyes y sus hijas llegaron a El Pardo en un coche conducido por don Felipe, con doña Letizia en el asiento del copiloto y la princesa Leonor y la infanta Sofía en el asiento de atrás. No obstante, debido a que el vehículo llevaba los cristales tintados, no se podía apreciar a las hijas de los Reyes, solo a don Felipe y a doña Letizia. Horas después, abandonaba El Pardo la Reina al volante de su coche, con su hija menor en el asiento del copiloto, pero ni rastro de la princesa Leonor. Por su parte, el Rey Felipe salía del reciento después en otro coche con un equipo de seguridad. Tampoco se pudo ver a la princesa Leonor en el vehículo en el que se marchó su padre, lo que ha generado muchas incógnitas sobre si la heredera se quedó más tiempo en El Pardo o cuándo abandonó la fiesta.
La princesa Leonor en su fiesta de cumpleaños. / Gtres
Un cumpleaños privado
Aunque ninguno de los asistentes a la fiesta por la mayoría de edad de la princesa Leonor se detuvo a hacer declaraciones a los reporteros que esperaban a las puertas del Palacio de El Pardo, lo cierto es que a la mayoría de los invitados se les pudo fotografiar con más o menos nitidez. Sin embargo, la única que permaneció ‘oculta’ a las cámaras fue, precisamente, la princesa Leonor.
Este digital ha tenido acceso a una imagen de la heredera a su llegada a la fiesta, en el vehículo en el que iba con sus padres y su hermana, en uno de los asientos de atrás. A pesar de las lunas tintadas, a través del cristal se puede ver a la princesa Leonor con el pelo suelto, algunos mechones sobre los laterales del rostro y bastante más maquillada que en los actos de la mañana. Asimismo, aunque no se aprecia con detalle su estilismo, la princesa de Asturias lleva un vestido en color rojo, uno de los tonos fetiche de su madre, la Reina Letizia. De hecho, se ha podido saber que la heredera apostó por un look de corte midi y de manga corta, aunque no se tienen más detalles del look. Curiosamente, además de ser uno de los colores estrella del armario de su madre, al que ha recurrido en fechas señaladas, también apostó por este tono su prima, Victoria Federica, en su puesta de largo.
El Rey Juan Carlos I a su salida de El Pardo / Gtres
Una estrategia medida
No ha trascendido el motivo por el que no se ha hecho pública ninguna imagen de la princesa Leonor en su fiesta de cumpleaños hasta ahora y por qué, a diferencia de su hermana, la infanta Sofía, en el caso de la heredera, se ha cuidado tanto su privacidad. Este jueves, la periodista Sandra Aladro apuntó en el programa Vamos a ver que, desde Casa Real se había evitado en todo momento que se fotografiase a Leonor, quizás para que no se produjera una instantánea conjunta entre Juan Carlos I y su nieta, con el fin de proteger la imagen de la princesa. Al fin y al cabo, ella encarna el futuro de la Corona y es fundamental mantenerla al margen de cualquier polémica.