Belén Rueda cumple 60 años: una cirugía reconocida y otros retoques estéticos
Expertas en medicina estética nos cuentan los tratamientos que la actriz podría haberse hecho para cuidar su imagen
Entre los retoques estéticos se encuentran los neuromoduladores, que ayudan a suavizar las arrugas y líneas de expresión

Hoy en día, hablar de retoques estéticos ya no genera escándalo. Las cirugías y los tratamientos faciales son decisiones personales que no deberían ser motivo de juicio. Cada quien tiene el derecho de acercarse a su propio ideal de belleza. Belén Rueda, la reconocida actriz, ha sido objeto de rumores y especulaciones sobre su apariencia desde sus primeros años en la pantalla, especialmente en la famosa serie Periodistas de los años noventa, hasta la actualidad, cuando acaba de cumplir 60 años. Este 16 de marzo celebra un nuevo año de vida, y a simple vista, parece mucho más joven de lo que marca su edad. Aunque esto podría atribuirse a un estilo de vida saludable, algunos creen que podría haber recurrido a algún ‘arreglo’. Sin embargo, ella misma ha negado rotundamente haberse sometido a intervenciones en la cara, asegurando que jamás se ha hecho nada, ni siquiera Bótox.
En una entrevista con Jesús Calleja, la protagonista de Los Serrano confesó haberse operado el pecho en su juventud, pero aclaró que, para su trabajo como actriz, las intervenciones faciales son peligrosas. «El rostro es nuestra herramienta de trabajo», explicó, defendiendo que la cirugía facial puede alterar el gesto y la expresividad, aspectos esenciales en la interpretación. Y razón no le falta, ya que las mujeres han sufrido históricamente la presión de mantener una imagen idealizada, y la industria del cine, especialmente Hollywood, es uno de los lugares donde esta presión es más brutal.
Belén Rueda ganó el Goya en 2005 por Mar adentro y su operación de pecho ya era evidente. (Foto: Gtres)
De hecho, no son pocos los actores y actrices que, al intentar adaptarse a los estándares de belleza impuestos, terminan perpetuando una imagen irreal. Esto da lugar a fenómenos como el edadismo, donde la juventud se convierte en un requisito casi obligatorio, y la emoción auténtica en pantalla puede verse desvirtuada. Es frecuente observar cambios extremos en los rostros: labios excesivamente voluminosos que no armonizan con las facciones, pómulos artificialmente altos o narices mal operadas, como la de Lucas, del dúo Andy y Lucas. Sin embargo, este no es el caso de Belén Rueda.
La madrileña comenzó su carrera como azafata televisiva y, con el tiempo, ha formado parte de proyectos tan diversos como El Orfanato, El Cuerpo y Madres. Amor y vida. Estos trabajos, junto con otros a lo largo de su carrera, la han expuesto a las presiones propias de la industria cinematográfica, pero Belén ha logrado mantenerse fiel a sí misma. A lo largo de los años, ha enfrentado las demandas del cine con dignidad, cuidando su imagen sin caer en excesos. Eso sí, varios expertos en medicina estética con los que hemos consultado aseguran que ha recurrido a algunos tratamientos estéticos que le han ayudado a mantenerse fresca y rejuvenecida.
Neuromoduladores, ácido hialurónico y labios
Según Cristina Solymosi, experta de Ma Belle Clinique en el barrio de Salamanca, Belén Rueda ha optado por la medicina estética regenerativa, realizando tratamientos suaves que mejoran la calidad de su piel sin alterar sus rasgos. Entre estos tratamientos se incluyen neuromoduladores como la toxina botulínica, que suavizan las arrugas en áreas como la frente, las patas de gallo y el entrecejo, sin perder la expresividad facial. Además, Belén parece haberse sometido a rellenos con ácido hialurónico en los pómulos y los surcos nasogenianos (líneas que van de la nariz a la boca), restaurando volumen de forma sutil y natural. En cuanto a sus labios, Solymosi señala que Belén ha priorizado la hidratación y la definición, en lugar de un aumento de volumen excesivo.
¿Está bien retocada para su edad? Para Solymosi, la actriz mantiene un equilibrio perfecto. «Su rostro no presenta signos evidentes de excesos, como hinchazón extrema o falta de expresividad. Esto sugiere que los tratamientos han sido bien planificados y moderados. Algunas líneas de expresión y la textura de su piel muestran un envejecimiento natural bien gestionado, sin recargar su rostro con demasiados procedimientos».


El rostro de Belén Rueda. (Foto: Gtres)
Por otro lado, Liseth Quintero, doctora de Clínica Trevi, coincide con este enfoque. La experta asegura que Belén está «muy bien retocada», pero sin perder su naturalidad. «El objetivo no es ‘planchar’ la piel, sino dejar un rostro más fresco y natural», afirma Quintero. La clave está en aplicar tratamientos que resalten la belleza natural sin forzar cambios drásticos. En cuanto a la toxina botulínica, la doctora explica que el efecto de este tratamiento generalmente dura entre 3 y 6 meses, y los resultados son sutiles, permitiendo que la persona mantenga su capacidad de expresarse sin perder naturalidad, a diferencia de otros procedimientos más invasivos que pueden alterar la expresión facial.
El truco de Belén Rueda para un cabello con volumen


El peinado de Belén Rueda. (Foto: Gtres)
Aprovechando que estamos en manos expertas, hemos consultado con Ma Belle Salón sobre cómo la intérprete mantiene su melena. Los expertos capilares nos cuentan que, a medida que envejecemos, el cabello tiende a perder densidad y volumen. En el caso de Belén, su pelo parece haber perdido algo de grosor con el tiempo, pero ha logrado gestionarlo de manera impecable. Suele optar por ondas suaves, una técnica que aporta volumen y movimiento al cabello. Además, es probable que utilice productos específicos como polvos voluminizadores o incluso tratamientos como el bótox capilar, que ayudan a mantener la hidratación, el brillo y una apariencia más densa.