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Todo lo que debe saber antes de comprar una alfombra nueva

¿Te agobia tanto acertar al elegir una alfombra que has renunciado a comprarla? Que si estampada o lisa, mejor con pelo o vinílica, redonda o alargada. Y, el máximo quebradero de cabeza, el tamaño de las alfombras. ¡Ufff!!, visto así todo de golpe, casi que entendemos tu pereza.

Pero aquí estamos para ayudarte. Nada de los típicos consejos que acaban por liarte más de lo que ya estabas. Lo que te proponemos son ideas muy fáciles de entender, sobre tus dudas concretas. Utilizamos un formato muy actual, el de FAQ ‘s sobre alfombras, al que estarás más que habituado si navegas por internet.

¿Merece la pena poner una alfombra en mi casa?

Salvo que te gusten los ambientes asépticos y sin carácter, las alfombras siempre aportan un toque de personalidad único. Pero, además de decorativas, son funcionales. Convierten una estancia fría en un espacio cálido y donde te apetece pasar más tiempo. Así que, ¡sí merece la pena! Y tú estarás de acuerdo en cuanto la coloques en tu casa.

¿Cómo se mide el tamaño de las alfombras?

La clave es el espacio disponible en la habitación donde vayas a ponerla, siempre tiene que haber un equilibrio entre las dimensiones de la estancia y las de la alfombra. Eso sí, ante la duda, mejor que te pases por exceso que por defecto. ¡Nada más ridículo que una mini alfombra perdida en el vacío de un suelo interminable!

Truco: Para no fallar al elegir el tamaño, lo mejor es hacer una simulación. Compra un rollo de esos de manteles de papel y recorta y coloca a modo de alfombra. ¡Nunca falla!

Alfombras de salón

Dormitorios

Comedor

Aquí pocas dudas, solo poner una alfombra si puede cubrir el espacio necesario para mover cómodamente las sillas al sentarte. Eso en cifras, son entre 55 y 75 cm añadidos al borde de la mesa.

Zonas de trabajo o estudio

También, solo una clave: que la mesa, los pies y las ruedas o patas de la silla queden cubiertas por la alfombra.

Alfombras de pasillo

Alfombras, niños y mascotas, ¿una relación siempre imposible?

Ni mucho menos. De hecho, nada más práctico que una alfombra en el dormitorio infantil o zona de juegos para que los más peques disfruten cómodos. Y, respecto a las mascotas, pues lo mismo. Te agradecerán hasta el infinito que les dejes tumbarse a descansar a tus pies, sobre una agradable alfombra.

Pero, esta pregunta nos sirve para desentrañar uno de los grandes misterios que giran en torno a las alfombras, la elección de su material. Porque ese es el problema con las alfombras cuando hay niños y mascotas, su mantenimiento.

¿Cómo elijo la forma de cada alfombra?

La apuesta más segura es seguir la forma de la habitación o de la distribución de los muebles en la zona donde pongas la alfombra. Un caso muy claro es el de las mesas de comedor redondas u ovaladas, en las que lo más práctico es trasladar esa forma a la alfombra.

Pero, también puedes usar la forma de la alfombra de manera disruptiva, precisamente, para romper con las líneas dominantes. Te servirá tener en cuenta que:

¿Mejor una alfombra lisa o estampada?

Si quieres la respuesta corta y poco arriesgada, está claro que una alfombra lisa combina y se integra mejor con el resto de la decoración. Además, es más difícil que te canses de ellas. Los tonos más neutros son más elegantes, los tonos vibrantes dan un aire más alegre y moderno.

Pero, hay personas que huyen de lo convencional o prefieren elementos estéticos de más impacto. No se puede discutir la belleza decorativa de un kilim o una alfombra persa. pero, asegúrate de ponerlas en una zona donde luzcan, ¡no se te ocurra ponerles una mesa o un sofá encima!