Investigación

Colau se niega a ceder un local municipal para un homenaje a los 21 asesinados de Hipercor

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, se niega a ceder un espacio público municipal para montar una exposición en la que se rendirá homenaje a las víctimas del atentado de ETA en Hipercor, del que se cumplen 30 años el próximo 19 de junio.

El presidente de la Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas (ACVOT), José Vargas, planteó esta petición personalmente hace varias semanas tanto a Colau como a su número 2, Gerardo Pisarello, al coincidir con ellos en dos actos oficiales. «En ambos casos», explica Vargas, «me pidieron que planteara la propuesta a su jefe de gabinete, que ni siquiera ha contestado a nuestros correos electrónicos».

La intención de este colectivo de víctimas es realizar un montaje con fotografías, vídeos y reseñas para recordar a las 21 personas asesinadas por ETA, con motivo del 30 aniversario del atentado, el mayor cometido por la banda terrorista en Barcelona.

Para ello, la directiva de la ACVOT había pensado en la antigua fábrica Fabra i Coats, un edificio emblemático de la ciudad que el Ayuntamiento de Barcelona gestiona desde 2009 como centro cultural. El inmueble se encuentra en el distrito de Sant Andreu, próximo al lugar en el que se produjo el atentado.

La regidora del PSC se desentiende

Ante la falta de respuesta de Ada Colau, la asociación solicitó una entrevista con la concejal de distrito, la socialista Carmen Andrés Auñón (elegida por las listas PSC), quien finalmente canceló el encuentro en el último momento.

Por último, José Vargas logró reunirse con el concejal de Cultura del distrito, Felipe López-Aranguren (elegido por las listas de Barcelona en Comú, la marca blanca de Podemos) para plantearle la petición. «Me dijo que estudiaría la propuesta pero tres días después me llamó para decirme que, sintiéndolo mucho, no podían cedernos ningún espacio para la exposición», señala el presidente de la ACVOT.

«Le dije que si Otegi les hubiera pedido un espacio para dar una conferencia seguramente le habrían dicho que sí», añade Vargas, «el concejal se hizo el ofendido y me contestó que ese comentario le parecía insultante».

Después de que el Ayuntamiento que preside Ada Colau haya cerrado las puertas a su asociación, José Vargas se muestra convencido de que la exposición conmemorativa del atentado de Hipercor será posible gracias a la colaboración del Gobierno central y de la Fundación de Víctimas del Terrorismo que preside Mari Mar Blanco. Su intención es que la muestra abra sus puertas en Barcelona durante la última semana de mayo y pueda ser visitada hasta el 19 de junio, coincidiendo con el 30 aniversario del atentado.

Mas retiró las subvenciones a ACVOT

No es el primer desaire que la Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas (ACVOT) recibe de las Administraciones catalanas. Cada 19 de junio, la asociación recuerda el aniversario del atentado ante el monumento erigido a las víctimas en 2006: un monumento de 12 metros de altura diseñado por el escultor norteamericano Sol LeWitt y situado en la Avenida Meridiana.

El entonces alcalde de Barcelona, Jordi Hereu (PSC), fue el encargado de inaugurar el monumento. Desde entonces, ningún alcalde de Barcelona ha acudido al homenaje a las víctimas de Hipercor: ni el convergente Xavier Trias ni Ada Colau.

«Ada Colau nos mandó el año pasado a su teniente de alcalde, Gerardo Pisarello», explica José Vargas, «aproveché para pedirle que adecenten un poco el monumento, porque no se encuentra en muy buen estado. Todavía estamos esperando a que el Ayuntamiento lo haga».

Tampoco ha llegado a visitar nunca el monumento el ex presidente de la Generalitat Artur Mas, quien en 2012 canceló la subvención anual de 100.000 euros que la ACVOT venía recibiendo desde los tiempos de José Montilla.

Memoria Histórica selectiva

La banda terrorista ETA asesinó a 21 personas y dejó heridas a otras 45 en el atentado de Hipercor cometido el 19 de junio de 1987. Para ello, los terroristas colocaron un artefacto con 200 kilos de carga explosiva en el maletero de un Ford Sierra robado, que estacionaron en el parking subterráneo del hipermercado.

Por este atentado, los miembros del comando Barcelona de ETA Josefa Ernaga, Domingo Troitiño y Rafael Caride Simón y Santi Potros fueron condenados a penas que rozan los 800 años de cárcel. Ahora, el equipo de gobierno de la alcaldesa Ada Colau se niega a rendir homenaje a las víctimas de la masacre, mientras quiere llevar a las escuelas las actividades de la Memoria Histórica para reabrir, 80 años después, las heridas de la Guerra Civil.