España

El PSOE de Sánchez sigue girando a la izquierda y no apoyará al Gobierno en el techo de gasto

José Luis Ábalos

El PSOE votará en contra del techo de gasto para 2018, que aprueba este lunes el Gobierno en Consejo de Ministros y la semana que viene será debatido y votado en las Cortes Generales como paso previo a la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), según anunció su secretario de Organización, José Luis Ábalos.

Con este rechazo, los socialistas cambian de postura respecto a su voto en diciembre del pasado año, cuando votaron a favor del actual techo de gasto en el Congreso junto a PP y Ciudadanos.

Críticas a C’S

Los socialistas criticaron que la formación de Albert Rivera siga «alimentando la esperanza» de llegar a un acuerdo con el Gobierno sobre el techo de gasto bajando los impuestos y exigió al partido que explique «cómo piensa pagar las pensiones de este país» y «si considera que el nivel de protección por desempleo es el adecuado».

Ábalos dijo que «queda muy bonito lo de bajar los impuestos» y también arremetió contra la política del PP de «recortar gasto porque renuncia a incrementar los ingresos». El socialista preguntó que «quién va a pagar las pensiones en dos años», ya que, a su juicio, «con el mismo dinero y más pensionistas habrá que bajarles la pensión».

Otro giro a la izquierda

Fue el pasado diciembre, cuando en plena guerra interna en el PSOE la gestora pactó con el Ejecutivo de Rajoy una subida del 8 % del salario mínimo y una décima más de margen de déficit para las comunidades autónomas de lo inicialmente estipulado, a cambio de su apoyo al techo de gasto del Estado, los objetivos de déficit y un conjunto de medidas fiscales con las que cuadrar las cuentas de 2017.

El acuerdo fue cerrado sin conocimiento de UGT y CCOO, que en ese momento se encontraban en la mesa de diálogo social y que lo consideraron una «puñalada» a sus negociaciones. Además, permitió a Podemos proclamar el «principio de la gran coalición» entre el PP, el PSOE y C’s.

Seis meses después, el PSOE de Pedro Sánchez no solo exhibe una buena sintonía con los sindicatos, sino que, entre la abstención y el voto en contra, opta por oponerse claramente a los objetivos de estabilidad del PP en su afán de proyectarse como la alternativa de izquierdas del país.