Zidane, el cuerpo técnico y el club en general tienen pánico al parón de selecciones. El éxodo de jugadores blancos comenzará a partir del lunes. En concreto, 12 serán los futbolistas que tendrán que hacer las maletas para defender los colores de sus respectivos países. Sergio Ramos y Marco Asensio están convocados con España, Vinicius con Brasil, Rodrygo con la selección olímpica de Brasil, Jovic con Serbia, Courtos con Bélgica, Lunin con Ucrania, Kroos con Alemania, Modric con Croacia, Varane con Francia, Odegaard con Noruega y Valverde con Uruguay. El resto de los jugadores se quedarán en Valdebebas, incluidos Hazard, Casemiro y Militao, afectados por el coronavirus, y Carvajal, que sigue lesionado.
El miedo en el Real Madrid por estos 10 días en los que muchos de sus jugadores estarán lejos de casa es perfectamente entendible. El calendario es tremendamente apretado y nueve de los 12 futbolistas tendrán que afrontar tres partidos con sus países. Y es que, todos los internacionales europeos jugarán ese número de encuentros en espacio de tiempo demasiado corto. Una cantidad de partidos que pone en peligro el físico de los futbolistas, que ya está muy desgastado en una temporada muy compleja.
Con un calendario tremendamente complicado en el horizonte, donde los más inmediato será visitar a un Villarreal lanzado en Liga y jugar ante el Inter de Milán en Italia, cualquier contratiempo en forma de lesión sería una muy mala noticia para Zidane y su plantilla. Por ello, el galo cruza los dedos para que todos se mantengan sanos, aunque en estos tiempos complicados el riesgo es mayor.
Y es que, durante estas concentraciones el coronavirus también es peligroso. Se rompe la burbuja del club y los internacionales comparten día a día con compañeros que llegan de otros equipos. En el anterior parón de selecciones en el Real Madrid el jugador que sufrió el virus fue Lunin, aunque finalmente quedó en un susto en forma de falso positivo. Otros, como la Juventus con Cristiano Ronaldo, no tuvieron tanta suerte. Por Valdebebas existe un temor lógico.