Xabi Alonso ha sacado el látigo en este inicio de la pretemporada en el Real Madrid. El entrenamiento del equipo blanco bajo el sol matinal de Valdebebas ha durado casi tres horas. Máxima intensidad y máximo sacrificio para un equipo que solamente tendrá 15 días de preparación en esta campaña antes de debutar contra Osasuna en la primera jornada de Liga en el Santiago Bernabéu.
La sesión del Real Madrid de este viernes arrancó en el gimnasio, con una activación tanto individual como grupal. Ya sobre el césped, los jugadores completaron circuitos de posesión, series de conducción y series de 4 contra 4 y 5 contra 5. Posteriormente, llevaron a cabo una fase táctica para terminar el entrenamiento con finalizaciones.
Un entrenamiento de máxima intensidad con Xabi Alonso a los mandos en la segunda sesión de pretemporada para el Real Madrid. En la primera, por la tarde, el técnico tolosarra se puso serio. Y en la segunda ya sacó el látigo. Y es que el segundo entrenamiento de pretemporada de los blancos en Valdebebas duró cerca de tres horas. Una pasada. Todo con el objetivo de llegar físicamente al 100% al inicio de temporada.
Solamente tendrá 15 días de pretemporada el Real Madrid antes de iniciar el curso 25/26 y Xabi Alonso sabe que necesita encender el motor cuanto antes mejor. Y eso ha hecho. Imponer la máxima intensidad desde el principio, exponiendo a sus jugadores a un desgaste físico severo desde las primeras sesiones para que puedan llegar como motos al debut liguero el día 19 de agosto contra Osasuna. No hay tiempo que perder.
Por otro lado, Xabi Alonso también ha sacado el látigo con los horarios. Si bien las sesiones son más largas, ya que la del pasado lunes duró dos horas y la de este martes cerca de tres horas. La temporada pasada la mayoría de sesiones duraban cerca de hora y media. Además, el técnico madridista ha ordenado que sus jugadores tienen que llegar una hora antes del inicio de cada entrenamiento. Una norma que se modifica respecto a la etapa anterior con Carlo Ancelotti, que era de 30 minutos.
Desde que los blancos fueron eliminados por el PSG en semifinales del Mundial de Clubes, hasta el partido contra Osasuna habrán pasado sólo 40 días, contando con que los futbolistas han disfrutado de unas minivacaciones entre la disputa de la cita mundialista y la vuelta al trabajo. Algo que obliga al técnico a hacer una pretemporada más que corta.
El equipo tendrá que recuperar el ritmo de cara a ese estreno y lo harán con un amistoso el próximo 12 de agosto, en Austria, ante el Tirol. Como ha sido habitual en los últimos años, también podrían disputar algún partido de entrenamiento en Valdebebas, contra algún equipo de la Comunidad de Madrid.