Tchouaméni vio amarilla en el último minuto que enfrentó a Getafe y Real Madrid en el partido aplazado de la jornada 20 de la Liga EA Sports y no podrá disputar el derbi del próximo domingo entre los blancos y el Atlético de Madrid. El cuadro de Ancelotti tiene un problema en defensa con esta ausencia y con el golpe que recibió Rüdiger y por el que tuvo que ser sustituido.
El Real Madrid venció en Getafe por 0-2 y terminó la noche del jueves como líder de la Liga EA Sports. Un doblete incontestable de Joselu le dio una victoria muy cómoda a los blancos. Pero no todo fueron buenas noticias. En los últimos segundos de partido, en un movimiento fantasma, De Burgos Bengoetxea le mostró una cartulina amarilla fantasma a Tchouaméni. Por ello, el francés se perderá el derbi del próximo domingo en el Santiago Bernabéu.
Faltaban 40 segundos para llegar al minuto 93 cuando Tchouaméni vio una cartulina amarilla por una falta en la frontal del área blanca. De hecho, al terminar el partido, Carlo Ancelotti fue muy enfadado al colegiado a protestarle esa amarilla y un escandaloso penalti no pitado a Brahim.
Esa tarjeta en el último segundo le impedirá a Tchouaméni estar contra el Atlético de Madrid el domingo en el Bernabéu. El francés tuvo que jugar toda la segunda mitad defensa central, ya que Rüdiger se marchó al descanso lesionado tras sufrir un fuerte golpe en el muslo. Con todo y con eso, Ancelotti confirmó en rueda de prensa que el alemán es fuerte y estará en el derbi del domingo.
Rüdiger se marchó lesionado
Antonio Rüdiger tuvo que abandonar el duelo que enfrentó a Getafe y Real Madrid al descanso tras sufrir un golpe con Mason Greenwood en muslo. El alemán trató de continuar e, incluso, tras irse al suelo y ser atendido por los servicios médicos, volvió al campo para terminar la primera mitad, pero finalmente no pudo seguir y fue cambiado.
Desde que Rüdiger sufrió el golpe, las muestras de dolor fueron evidentes. El germano, tenaz como pocos, intentó resistir, pero el golpe sufrido en la pierna izquierdo continuó doliéndole y, finalmente, tras pasar por el vestuario al término de los primeros 45 minutos, fue sustituido por Eduardo Camavinga. El dolor fue tan intenso que al finalizar el primer acto, se tiró al suelo y tuvo que ser ayudado por los servicios médicos del conjunto blanco para abandonar el terreno de juego.
Esta dolencia, a falta de conocerse el alcance exacto, es un contratiempo muy serio para Carlo Ancelotti, ya que teniendo en cuenta las lesiones de Militao y Alaba, una nueva dolencia en el centro de la defensa dejaría muy tocada a la zaga madridista. No obstante, tras las primeras exploraciones en el vestuario, los servicios médicos observaron que sufrió lo que se conoce como un bocadillo. «No es grave, pero duele mucho», aseguraban en la caseta madridista.