La designación de César Soto Grado para el Alavés-Real Madrid no es, ni mucho menos, positiva para los blancos. A pesar de que los madridistas evitan a Martínez Munuera, que no pitará el partido finalmente por motivos personales, los hombres de Ancelotti tendrán también ciertos peligros con la presencia del abulense al silbato. De hecho, en los últimos precedentes con él, no tienen muy buenos recuerdos.
Soto Grado ha arbitrado esta temporada tres encuentros de los madridistas, de los que los blancos han ganado sólo uno. Y no estuvo exento de polémica. Se impusieron remontando al Valencia con uno menos, puesto que el colegiado expulsó a Vinicius por una acción de lo más controvertida con Dimitrievski, que fingió una agresión tras provocarle antes. Los madridistas fueron capaces de remontar con uno menos, con un gol de Bellingham en el descuento.
Donde no pudieron ganar fue en el último derbi liguero. Se habían adelantado en el Bernabéu, pero una decisión orquestada desde el VAR, terminó llevando a Soto Grado a pitar un penalti surrealista. En un balón dividido al que no llegaron ni Lino ni Tchouaméni, que se paseó por el área y terminó en nada, vieron un penalti por un leve pisotón del francés al brasileño cuando los dos terminaban de disputar el esférico.
Aquella acción supuso el definitivo empate. Un empate que llevo al Real Madrid a sufrir el segundo de los tres escándalos consecutivos –Espanyol, Atlético y Osasuna– y que llevaron a dilapidar una ventaja de siete puntos en el liderato respecto al Barcelona. Los de Flick se reengancharon, además, con sendas ayudas en sus encuentros.
Además, pitó el partido de la primera jornada liguera entre el Real Madrid y el Mallorca, en el que los blancos no fueron capaces de pasar del empate. Eso sí, pasó por alto una expulsión de Maffeo, por una fea entrada por detrás con la plancha a Vinicius. El conjunto madridista, que venía de ganar la Supercopa de Europa, no cuajó un buen partido y acabó perdiendo sus primeros puntos del campeonato.
Los precedentes de Soto Grado
Juan Martínez Munuera no podrá estar al frente del encuentro, por su paternidad. El alicantino era uno de esos árbitros señalados directamente por el Real Madrid, por su relación con el caso Negreira, puesto que fue uno de los que contrató los cursos del hijo del que fuera vicepresidente del CTA. Sin embargo, César Soto Grado también está en esa lista negra. Como él mismo reconoció al organismo dirigido por Medina Cantalejo en el cuestionario que les pasaron a todos los árbitros, aunque no consta que tuviera como coach a Javier Enríquez, sí que se reunió con él en alguna ocasión en los hoteles de concentración.
Además, Soto Grado tiene un amplio historial contra los madridistas. Más allá de ser uno de los considerados como árbitros negreiros, tiene una anécdota muy recordada. En un duelo entre Real Madrid y Osasuna, en la temporada 2021-2022, el árbitro tuvo una reprimenda con varios futbolistas del conjunto blanco. «Habéis tenido 90 minutos, así que no me vengáis protestando ahora que si pongo un minuto», les indicó.