El fichaje de Kylian Mbappé por el Real Madrid ha sido puesto, como prácticamente toda Europa, en cuarentena. El coronavirus afecta también al mercado de fichajes y se entromete en el plan que el club madridista tenía para afrontar desde este verano la operación que termine con el atacante del París Saint-Germain vistiendo de blanco. La incógnita de saber cuándo terminará la presente temporada y los intereses del jugador hacen que desde el Bernabéu empiecen a ver que este tampoco será el mercado en el que la estrella francesa fiche por la entidad madridista.
La temporada se encuentra paralizada y el PSG se encuentra en plena disputa por la Champions, objetivo número uno de los de Tuchel. Pese a los constantes episodios de desplantes del delantero ante el propio técnico, Mbappé no quiere terminar mal con el conjunto galo después de una campaña larga que se alargará por un tiempo que por el momento se desconoce.
A esto hay que sumar que el PSG, como es lógico, no está por la labor de vender a su estrella y no dudará en poner trabas una y otra vez a los blancos. Ya han demostrado en más de una ocasión que no les tiembla el pulso a la hora de tomar decisiones respecto a la rebeldía de los jugadores. Lo hicieron con Rabiot o incluso con Cavani y Neymar en los últimos tiempos y lo harán, si es necesario, con Mbappé.
Tampoco se cortarían a la hora de tomar represalias contra el Real Madrid. Los blancos mantienen buenas relaciones con la entidad que dirige Al-Khelaifi y no quieren iniciar una guerra abierta con el conjunto francés. Por ello, los blancos esperarán a tener tiempo para allanar el terreno lo suficiente como para conseguir la rendición del PSG en la negociación, algo que no podrá suceder en principio antes de que arranque la próxima temporada.
Los planes madridistas pasaban por comenzar a encarrilar su fichaje en los próximos meses e incluso dejarlo cerrado. Sin embargo, la convulsión provocada por el COVID-19 en el fútbol, aplaza todas las esperanzas de los blancos en 2021. Será entonces cuando puedan aprovecharse de su situación contractual para presionar. Mbappé sigue negándose a renovar y para entonces le quedará sólo un año de contrato.
