Kylian Mbappé es el mejor jugador del mundo. Lo demuestra en cada acción, aunque esta sea en el minuto 94 del descuento, con el tiempo casi consumido y forzando un uno contra uno que terminó derribando el muro que Courtois había creado en la portería del Real Madrid. Por todo esto, el francés es elegido y el madridismo espera que sólo quede un capítulo para tenerle como rival.
Querido por unos, querido por los otros. Así empezó el partido de Kylian Mbappé en el Parque de los Príncipes. No habían saltado ninguno de los dos equipos a calentar y cuando fue presentando en el estadio el sector madridista no dudó en arrancarse con un “¡Kylian, Kylian!”. La noche se presentaba rara para el de Bondy. Su presente contra, posiblemente, su futuro, pero esto no le afectó. Se le vio con ganas desde el primer minuto y fue un auténtico incordio para la zaga madridista.
Escorado a la izquierda, en la primera oportunidad que tuvo rompió a Dani Carvajal, cedió a Di María y, por suerte para los blancos, el argentino tiró arriba. Un auténtico martirio por la banda derecha. Le dio la noche al de Leganés y, si no llega a ser por Courtois, a los 17 minutos hace el primero. El jugador que encogía el corazón de todos los madridistas cada vez que cogía la pelota. La afición blanca espera que a este sufrimiento le quede sólo un episodio y que a partir de la próxima temporada toque disfrutarle en el Bernabéu.
Si el partido lo comenzó rompiendo a la zaga madridista, en la segunda mitad recibió un gran pase de Achraf en el área, se giró y sacó un disparo raso que por suerte para el Real Madrid pudo para Courtois. Tenía decidido amargar la noche a Carvajal y en la enésima arranca el madridista le terminó haciendo penalti. No podía frenarle. Menos mal que estaba Thibaut para retener a Messi y su lanzamiento.
El partido de Mbappé le eleva a la categoría de ser en estos momentos el mejor jugador del mundo. Eclipsó a Messi y devoró a un Real Madrid que pasó una noche muy complicada. Antes de acabar y dejar claro que está un peldaño por encima del resto, tuvo tiempo de dejar en el camino a Mendy y hacer el gol de la victoria para un PSG que fue muy superior gracias a Kylian. En tres semanas el desenlace en el Bernabéu.