Nadie sabe nada de Isco Alarcón. El jugador del Real Madrid ha desaparecido de manera fulminante de los planes de Carlo Ancelotti, hasta el punto de que sus últimos minutos con el conjunto blanco se remontan al 25 de septiembre. Siete partidos ha disputado el equipo desde entonces, que el malagueño ha visto desde el banquillo o desde su casa. Comenzó la temporada jugando y parecía que el técnico contaba con sus servicios, pero a medida que esta avanza, su presencia sobre el césped ha quedado reducida a la nada.
Isco era uno de los descartes del club para esta temporada. La puerta de salida hace mucho tiempo que está abierta para el andaluz, pero las ofertas por él no llegan. Como tiene contrato hasta el término del presente curso, a los madridistas no les ha quedado más remedio que mantenerle en nómina y, con el regreso del entrenador italiano, comenzó la temporada siendo considerado como un jugador importante para él.
De hecho, Isco se tomó en serio desde el primer momento esta nueva temporada. A su llegada de vacaciones, se vio a un jugador muy distinto al de la última etapa con Zidane. El mediocentro llegó en un gran estado de forma y amenazaba con ir recuperando su nivel y su influencia en el juego del equipo. Hace tiempo atrás, el futbolista del conjunto blanco llegó a ser muy importante en los planes de Ancelotti y de Zizou, pero se fue diluyendo con el paso de las temporadas.
Ahora, definitivamente, ha desaparecido para el italiano. En total suma 168 minutos, repartidos en seis de los ocho primeros partidos de la temporada. De hecho, fue titular en dos de los partidos del conjuto madridista, ante el Levante y el Betis, llegando a marcar frente al Mallorca en el Bernabéu. Sin embargo, su último partido disputado fue el siguiente al de los bermellones.
La última aparición de Isco se remonta al partido ante el Villarreal, en la octava jornada. Entonces jugó 10 minutos en el tramo final del partido, sustituyendo en el minuto 80 a Asensio, con el fin de buscar una reacción en el equipo, que empataba a cero ante los amarillos y que se acabó dejando dos puntos en el Bernabéu. A partir de ahí, banquillo, lesión y más banquillo.
Del optimismo a la desilusión
Lo cierto es que la temporada de Isco, en los dos meses y medio que se llevan de curso, ha estado marcada por constantes altibajos. El malagueño se presentó en pretemporada en plena forma, buscando ganarse un hueco en los planes de Carlo Ancelotti, que quedó sorprendido con su disposición y su buen estado físico. Todo apuntaba a que la mejor versión del malagueño podría volver y más aún después de dos titularidades consecutivas y a un gol en los primeros encuentros que jugó.
Sin embargo, a partir de ahí, Isco se ha apagado. Del optimismo con el regreso de Carletto al banquillo, ha pasado a desilusionar una vez más. Tras un partido sin jugar, ante el Sheriff, en el que los madridistas necesitaban remontar y el italiano no contó con él a pesar de haber sido uno de los goleadores del encuentro anterior, no ha vuelto a estar ni cerca de saltar al terreno de juego.
Antes del parón internacional de octubre, una sobrecarga en la espalda le impidió estar contra el Espanyol. Tras las fechas internacionales, siguió ausente durante tres encuentros, ante Shakhtar, Barcelona y Osasuna. Regresó a la convocatoria para el duelo ante el Elche, donde no tuvo minutos, al igual que le sucedió en el enfrentamiento contra los ucranianos en el Bernabéu.
A medida que avanza el curso, Ancelotti empieza a dejar claro cuáles son sus planes y ya tiene un once tipo en el que, como se esperaba, Isco no tiene cabida. Además, la presencia de jugadores como Valverde o Camavinga en el centro del campo, incluso la reconversión de Asensio como volante, le merma sus opciones de tener presencia en el equipo.
Hay que recordar que Isco acaba contrato en junio de 2022 y desde el Real Madrid no hay ninguna intención de ampliarlo. En Valdebebas ya le abrieron las puertas para marcharse hace un año, cuando el malagueño pidió salir en enero, y desde entonces no se cuenta con él. De hecho, el club estaba dispuesto a facilitar al máximo su salida, pero el futbolista no ha recibido ninguna oferta, por lo que todo apunta a que agotará su vinculación con el conjunto madridista.