El Bayern de Múnich aún tiene mucho en juego la presente temporada, pero vive sumido en un mar de dudas con respecto a la próxima. El conjunto bávaro, aún dirigido por Thomas Tuchel, se encuentra a tan sólo dos partidos de poder proclamarse campeón de Europa. Eso sí, la empresa no será nada sencilla, tendrá que lograr clasificarse en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid y vencer en la final al PSG o a su rival directo en Alemania, el Borussia Dortmund.
Sin embargo, hace semanas que el técnico y el club acordaron una salida amistosa cuando finalice el presente curso y así lo hicieron saber de manera oficial, pero el gigante alemán está encontrando más problemas de los esperados a la hora de cerrar a su sustituto.
Tanto es así que Max Eberl, director general deportivo del Bayern de Múnich, se ha fijado en un entrenador que puede ser despedido de su actual equipo al finalizar la temporada. Se trata de Ten Hag, actual técnico del Manchester United, que está realizando una campaña terrible en el equipo inglés y que salvo giro de guión acabará fuera de Old Trafford.
El neerlandés deberá mantener una conversación con el nuevo copropietario del United, Jim Ratcliffe, cuya primera idea es mantener a Ten Hag por lo caro que sería su destitución y por la falta de candidatos válidos al banquillo del Teatro de los Sueños. Ahora, Ratcliffe sólo necesita algún argumento deportivo que justifique su decisión, pero con el equipo octavo en la Premier League, el único salvavidas que le queda es ganar la FA Cup al Manchester City.
El técnico, por su parte, estaría encantado de llegar al Bayern de Múnich cuando la propiedad del United le certifique su despido y le pague el finiquito que le corresponde. No deja de ser llamativo que un club con la historia del muniqués, con todas las opciones de proclamarse campeón de Europa, tenga que fijarse en el descarte de otro club para poder cerrar a su nuevo entrenador.
Los planes fallidos del Bayern Múnich
Las primeras opciones para el banquillo del Allianz Arena eran Xabi Alonso y Nagelsmann. Pero ambos le dieron calabazas. El español decidió continuar un año más, al menos, en el Bayer Leverkusen (con el que puede completar una temporada perfecta) y el alemán rechazó regresar, puesto que renovó su contrato con la Federación Alemana de fútbol como seleccionador.
Tras estos dos primeros contratiempos, desde la directiva muniquesa comenzaron los nervios y se fijaron dos nuevos objetivos, algo menos conocidos, pero que encajan bien con la filosofía del club: Arne Slot, actual entrenador del Feyenoord neerlandés y Rangnick, seleccionador austriaco. Pero la sorpresa llegó cuando ambos también rechazaron la propuesta que llegaba desde Baviera. Slot aterrizará en Anfield para ocupar el puesto que deja libre Klopp y Rangnick decidió continuar con su cargo en la Federación Austriaca.
Antes de llegar a la opción de Ten Hag, el Bayern sondeó a Zidane, que rechazó el proyecto a las primeras de cambio, y a Julen Lopetegui, al que atrae más el juego y la competitividad de la Premier League y ha acabado firmando por el West Ham. Por ello, Ten Hag se ha convertido en una de las pocas balas que le quedan a los directivos del Bayern de Múnich.
