La trascedencia del duelo entre el Real Madrid y el Borussia Monchengladbach quedó en evidencia cuando se produjo una imagen poco habitual. El presidente del club blanco, Florentino Pérez, bajó al túnel de vestuarios en los prolegómenos del último partido de la fase de grupos de Champions.
El mandatario blanco saludó a todos y cada uno de los futbolistas blancos chocando manos e incluso abrazándose con ellos. Florentino Pérez estuvo en la parte baja del estadio Alfredo di Stéfano antes de volver al palco de autoridades.
El Real Madrid nunca ha sido eliminado en la fase de grupos de la fase de grupos de la Champions League hasta la fecha y el presidente blanco no quiere que sus chicos vivan ese momento. Por eso bajó a motivarles y a darles todo el apoyo posible antes del partido del año.
