Jesús Vallejo está concentrado en la disputa de los Juegos Olímpicos. El central es uno de los hombres importantes del equipo dirigido por Luis de la Fuente y su presencia se antoja protagonista en la cita que se celebrará en Tokio. Pero en cuanto acabe la participación española en el país nipón, el defensa maño tendrá que afrontar su futuro, que en estos momentos no está nada claro. Carlo Ancelotti no ha podido trabajar con el de Zaragoza, lo que le ha impedido verle de cerca y lo que ha provocado que otros jóvenes que opositan a ser el cuarto zaguero del equipo blanco, como Mario Gila y Víctor Chust, tomen ventaja. Al mismo tiempo, clubes de primer nivel como es el caso del Espanyol están muy pendientes del futbolista.
El club catalán tiene entre sus objetivos para la próxima temporada a un Vallejo que a sus 24 años tiene que dar un paso al frente en su progresión. Tras dos temporadas jugando cedido en el Granada, donde ha alternado etapas de titular con épocas donde ha tenido menos protagonismo, el Espanyol podría ser una buena salida para un jugador que en el Real Madrid no le ven preparado para ocupar una de las plazas dos plazas libres que se podrían terminar quedando en la plantilla si finalmente Raphael Varane hace las maletas. El club tiene claro que Alaba, Militao, Nacho y un canterano -Chust o Gila- serán en principio los cuatro centrales siempre que no aparezca una oportunidad de mercado, aunque no cierra la puerta del todo al aragonés.
No obstante, los planes de Vallejo pasan por asentarse en el Real Madrid. El deseo del defensa es terminar los Juegos Olímpicos y tener una ficha en la plantilla blanca, algo que en estos momentos se antoja muy complicado. Desde que fichó por la entidad madridista, nunca ha sido capaz de demostrar el nivel que sí ha enseñado en las categorías inferiores de la selección española, donde siempre ha asumido el papel de líder. Su idea es volver a Valdebebas y ganarse su espacio, aunque tiene casi imposible ser algo más que el cuarto central del equipo, lo que le lleva a jugar muy pocos minutos.
Una incógnita
El Real Madrid fichó a Vallejo en 2015 procedente del Zaragoza. En su primer año continuó cedido en el club maño, mientras que en el segundo se fue cedido al Eintracht de Frankfurt, donde gozó de muchos minutos y se ganó llegar a la primera plantilla del conjunto blanco. Dos años, entre 2017 y 2019, donde las lesiones y la falta de confianza de los entrenadores le privaron de minutos, por lo que volvió a hacer las maletas para probar suerte en el Wolves inglés, aunque antes amplió su contrato con la entidad madridista hasta 2025.
En la Premier no tuvo minutos, por lo que en enero de 2020 regresó a España para pasar a formar parte de un Granada histórico. En el conjunto andaluz completó el año pasado su temporada con más minutos. Ahora, tiene que seguir buscando su sitio. Él está convencido de que ha llegado el momento de triunfar en el Real Madrid. En este tiempo ha madurado y ha aprendido a manejar su físico, lo que le ayuda a tener menos lesiones, su mayor problema en estos años, pero para ello le tienen que dar esa oportunidad que demanda. El Espanyol no le pierde de vista, al igual que más clubes españoles e internacionales.